
La producción ganadera, enfrenta desafíos a nivel mundial por sus impactos ambientales, especialmente en lo relacionado a las emisiones de gases de efecto invernadero. En Uruguay, encuentra un aliado para la transformación hacia una ganadería más sostenible. El país, donde la ganadería se desenvuelve mayormente en campos naturales, ha asumido y refuerza un papel crucial en la preservación de estos ecosistemas.
En respuesta a este desafío, la alianza estratégica entre Marfrig y el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) impulsa un proyecto integral, que cuenta con el apoyo de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII). Respaldada por la propuesta de Ganadería Regenerativa de INIA, la iniciativa busca la preservación de ecosistemas, promoviendo y validando una ganadería más sostenible.
El proyecto se enmarca en el Programa Huella Ambiental que lleva adelante Marfrig y tiene una duración de tres años. Incluirá productores con diferentes sistemas productivos ganaderos, en donde se evaluarán las variables ambientales: huella de carbono, stock de carbono en el suelo, índice de integridad ecosistémica y biodiversidad.
Comercialmente Marfrig tendrá dentro de su cartera, productos con valor agregado ambiental producidos en establecimientos ganaderos que miden y gestionan indicadores ambientales adaptados a Uruguay, basados en ciencia e investigación.
Con este proyecto, Marfrig e INIA promueven la sostenibilidad de la cadena cárnica, contribuyendo así a los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) y consolidando un legado para las futuras generaciones. Además de fortalecer la imagen de los productos uruguayos a nivel internacional.
“Desde Marfrig buscamos las oportunidades de agregar valor a la producción, cumpliendo con objetivos de la agenda de desarrollo sostenible”, explicó a Rurales El País la Ing. Agr. Laura Núñez, responsable del Programa Huella Ambiental de Marfrig.
Esta herramienta de investigación presentada contempla los sistemas de producción de Uruguay, y la alianza con el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria en su programa de ganadería regenerativa así lo demuestra.
“El fin es generar un protocolo nacional que permita salir al mercado con un producto que tenga una marca de ganadería regenerativa, y entonces que se vea que eso se produjo en un establecimiento que cuida los recursos naturales”, sostuvo Núñez.
Acerca de presentarlo en un evento como Agro en Punta, Núñez dijo que permite “mostrar a Uruguay como un país donde se trabaja de forma transparente y confiable, y que lo hace desde muchos años antes de que la sostenibilidad estuviera tan en agenda como ahora”, refiriéndose especialmente a la forma de producir alimentos de nuestro país.