El economista Álvaro Pereira, jefe de acceso e inteligencia de mercados del Instituto Nacional de Carnes (Inac), explicó que en el acuerdo logrado entre la Unión Europea y el Mercosur, el 90% de los bienes que se comercializan bajan sus aranceles a 0% de forma inmediata una vez que se firme el tratado, pero en el caso de los productos agrícolas es diferente, “son productos sensibles, que tiene un tratamiento hiper particular”.
Entrevistado en Valor Agregado de radio Carve, Pereira señaló que habrá cuotas para etanol, azúcar y carne de cerdo, productos lejanos para Uruguay, pero también habrá cuota para arroz, lácteos y carne bovina.
Profundizando en carne bovina, el “arancel de la cuota Hilton desaparece, entonces el Mercosur tendrá la cuota de 45.000 toneladas que paga 20% actualmente, eso para Uruguay son 5.600 toneladas, y son US$ 13 millones que se dejarían de pagar”, explicó el integrante de Inac.
Cuota de 99.000 toneladas
Con respecto a la nueva cuota, “es una que queda con un arancel del 7,5%, que es realmente atractivo, si aspiráramos a consolidar un comercio sostenido por fuera de cuota y arancel preferencial, el arancel por defecto en Europa es del 40%, entonces que exista esta ventana para exportar por el 7,5% es realmente una ventaja”.
Si todo el Mercosur fuera a exportar esas 99.000 toneladas por fuera de la cuota, y pagando el arancel correspondiente, se dejarían algo más de US$ 600 millones.
Uno de los aspectos positivos de esta nueva cuota, es que no hay un requisito específico sobre cómo debe de ser la terminación de los animales, como si sucede con la cuota Hilton, “lo que sí está en negro sobre blanco, es el método de preservación de la carne, un 55% del contingente debe de ir enfriado, y el resto congelado”.
Sobre el futuro del comercio cárnico con Europa, desde el Inac se visualizan dos posibilidades: “que el acuerdo genere comercio nuevo y toneladas de exportación a Europa incrementales, o la otra es que haya un cambio, pasando carne de una cuota a otra”, expresó Pereira, que además ejemplificó sosteniendo que “Uruguay está mandando mucha carne congelada a través de cuotas que pagan arancel de entre el 10 y 15%, podríamos pensar que se mantenga esta carne en esa cuota y se generará comercio nuevo, o directamente que esta carne vaya a la cuota congelada”.
“En lo que he hablado de forma informal con los exportadores, es que es posible pensar que esta cuota sería muy útil para darle continuidad a la 481, de repente esta última llega en el arranque del trimestre, y le das carne fresca a los importadores, y con el otro contingente podes llegar a complementar el trimestre”, detalló.
Carne ovina
Aquí la situación es diferente, “no es un producto que tiene la sensibilidad de la carne bovina, se reconoce como deficitario en la materia. El gran asunto ahí es la carne con hueso, donde permanecerá la restricción sanitaria”.
En referencia a los procesos que restan para que se concrete el acuerdo, Pereira hizo la salvedad de que “no es un acuerdo comercial que tenga 100% de probabilidad de éxito, hay que transitar etapas de democracia en Europa que lo pueden hacer caer”.
"Si todo se da de buena forma, uno se imagina un escenario de que se confirme esto para el 2026", concluyó Pereira.