Luego de tres subas consecutivas de los lácteos en Fonterra, este martes se dio la primera baja en el mercado internacional desde que comenzó el año. En el segundo remate mensual de la neozelandesa láctea, el índice de precios bajó 0,9% respecto al último remate y cerró en un precio promedio de US$ 5.039 por tonelada.
La leche en polvo entera, el principal producto exportado por Uruguay, bajó 2,1%, a US$4.596. La leche descremada en polvo aumentó 1,6%, a US$4.545. La manteca también bajó, 1,8%, a US$ 6.958
A propósito, Justino Zavala, integrante de la Agremiación de Tamberos de Canelones, hizo referencia a que “era esperable” algún vaivén entre tanta incertidumbre mundial, aunque aseguró que los fundamentos de los precios “siguen vigentes” por el desencuentro entre la oferta y la demanda
Según el Instituto Nacional de la Leche (Inale) “son ciertas” las incertidumbres generalizadas a nivel de la economía global generadas a raíz de la guerra entre Rusia y Ucrania, que van desde la incertidumbre por los embarques encaminados al país dirigido por Putin, incertidumbre para recibir los pagos, sobre cómo se desenvolverá el comercio en futuro inmediato, en el aumento de los precios de los granos, del petróleo y de los fertilizantes, entre otras.
En los últimos 10 años las exportaciones de Uruguay a Rusia han promediado US$ 70 millones de dólares; y en algunos años superó los US$ 100 millones. Así, Rusia representa 10% del valor de las exportaciones de lácteos de Uruguay.
Los principales productos de exportación, y su participación en el total de las exportaciones, ha sido la manteca, con US$ 39 millones (53%); el queso, con US$ 16 millones (22%); la leche en polvo entera, con US$ 12 millones (17%); la leche en polvo descremada, con US$ 4,5 millones (6%); y el suero en polvo US$ 0,8 millones (1%).
Perspectivas. Durante 2021, la producción de lácteos en el mundo se enlenteció y prácticamente se estancó en 2021. Además, la demanda por importaciones creció en China y otros países asiáticos. Brasil, como uno de los principales socios comerciales de Uruguay reflejó una caída del valor de las importaciones. En los hechos los precios internacionales se incrementaron y se encuentran en niveles elevados, que no se veían desde 2014.
Para 2022, diversos analistas internacionales señalan que los precios seguirán altos en el primer semestre (así lo indican los precios de los futuros de los principales commodities lácteos), pero la claridad sobre el desempeño del mercado resulta difícil de definir a partir de la volatilidad que ya estaban experimentando los precios, a lo que ha de agregarse el conflicto entre Ucrania y Rusia, los bloqueos, los efectos económicos, sociales, políticos, que se están observando y que acusarán una dinámica inesperada.