En un contexto de cambios acelerados en el comercio internacional de carne, el ingeniero agrónomo y consultor privado Roberto Vázquez Platero analizó en entrevista con Valor Agregado el nuevo escenario que enfrenta Uruguay, luego de que Estados Unidos confirmara la aplicación de un arancel adicional del 40% a las exportaciones brasileñas de carne vacuna. En contraste, Uruguay mantiene el arancel del 10% que ya estaba vigente.
“Estamos ante un momento extraordinario en el mercado mundial de la carne, liderado por el precio en Estados Unidos”, señaló Vázquez Platero. El experto recordó que el novillo en EE.UU. cotiza actualmente en US$ 5,20 por kilo vivo, y el ternero ronda los US$ 9, una suba “espectacular” si se compara con el ciclo alcista de hace una década. Además, destacó que, pese a una reducción histórica del rodeo y una baja natalidad, el consumo sigue en máximos.
El fenómeno está sostenido por un cambio estructural: “La gente está comiendo más carne, no tanto por precios, sino por una mejor situación económica. Hay plata en la calle y cambios de hábitos desde la pandemia, como el mayor consumo en los hogares que se ha mantenido”, explicó.
La decisión del gobierno de Donald Trump de subir el arancel a la carne brasileña al 50% —sumando el 10% existente— puede abrir oportunidades para Uruguay, pero no sin riesgos. En 2024, Brasil exportó unas 250.000 toneladas de carne vacuna a EE.UU., y en el primer semestre de 2025 ya llevaba 150.000.
“Nos beneficia, pero no somos los únicos. Australia será el gran ganador, ya que tiene un acuerdo de libre comercio con EE.UU. que le permite exportar sin pagar arancel”, sostuvo Vázquez Platero. Aclaró que, aunque Uruguay puede aprovechar esta ventana, no está en condiciones de sustituir el volumen brasileño.
Brasil redirecciona y Uruguay debe estar atento
La consecuencia inmediata es que Brasil redirigirá esa carne a otros mercados, especialmente a China, segundo destino en importancia para Uruguay. “Son vasos comunicantes: lo que Brasil no coloque en EE.UU. lo pondrá en otros destinos, y eso nos generará más competencia”, advirtió.
En este sentido, Vázquez Platero insistió en que no se trata de un “milagro comercial” para Uruguay: “Hay que tener cuidado, porque esto es claramente una medida política y podría pegar en otros países también”.
El experto destacó que el alza de precios no solo se explica por la guerra arancelaria, sino por fundamentos sólidos de oferta y demanda. “El promedio de exportación uruguaya peso carcasa aumentó 20% respecto al año pasado y se han registrado semanas con precios de hasta US$ 5.900 por tonelada”, indicó.
Además, resaltó un cambio en la composición de los destinos: “Antes, el 50% de nuestras exportaciones iba a China, y poco más del 20% a Estados Unidos. Hoy eso cambió. EE.UU. ha ganado relevancia y en semanas recientes Europa también tuvo un rol más fuerte, con valores promedio de entre US$ 7.000 y US$ 8.000 por tonelada”.