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La extracción forestal podría llegar a 25 millones de metros cúbicos

Crece el área plantada y mejora la productividad de nuevas variedades.

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Celulosa. Es el principal producto con valor agregado del sector forestal y todavía se puede crecer.

Pablo Antúnez.

Si la forestación uruguaya mantiene el actual crecimiento, en las próximas décadas, los niveles de extracción de madera podrían pasar de 14 millones de metros cúbicos a 25 millones de metros cúbicos, según estimó el economista Senior de la Consultora CPA Ferrere, Alfonso Capurro. El consultor presentó esta semana, en el Hotel Raddison, el informe: “Contribución de la Cadena Forestal a la Economía Uruguaya”.

Capurro afirmó que “Uruguay no tiene hoy capacidad industrial para absorber esa cantidad de madera”, por lo que para generar valor agregado adicional son necesarias más inversiones a nivel industrial que acompañen el crecimiento de la masa forestal, en momentos en que está en juego la instalación de una tercera planta de celulosa.

En el año 2016 las exportaciones del sector forestal alcanzaron US$1.534 millones, incluyendo las colocaciones de celulosa, madera y productos de madera, papel y cartón. Esa cifra representó el 17.5% del total de las exportaciones de bienes, y colocó al sector como la segunda cadena productiva en importancia detrás de la cadena cárnica.

“Hay dos razones que hacen al crecimiento en lo que tiene que ver con la oferta potencial de madera”, explicó a El País el gerente de la Sociedad de Productores Forestales del Uruguay, Atilio Ligrone.

Todos los años “se agregan 20.000 hectáreas más de bosques y además, cada hectárea de las nuevas, tanto las que se cortan como las que se plantan, se hacen con un material genético con mucha mayor productividad de la que hubo en la producción anterior (Clones). Entonces, la productividad de madera por hectárea se incrementa permanentemente por la incorporación de estos nuevos materiales y por aumento del área”, afirmó Ligrone.

Para el gerente de la Sociedad de Productores Forestales, si el escenario futuro fuera el mismo que tenemos hoy día, “con la instalación de una tercera planta de celulosa, teniendo en cuenta que el año pasado dos tercios de los 14 millones de toneladas de madera tuvieron por destino la celulosa, se llegarían a esos 25 millones de extracción” que proyecta el trabajo de CPA Ferrere.

PIB. El estudio de la consultora, especialmente realizado para la Sociedad de Productores Forestales, mostró que la silvicultura está representando el 0,5% del Producto Interno Bruto (PIB), en 2016 representó el 10% de la energía eléctrica generada, 15.200 empleos y hay 1.800 empresas vinculadas al sector: 1.700 son micro y pequeñas (con promedio de 20 ocupados).

La forestación generó el 3,6% del Producto Interno Bruto en 2016 y el 65% de lo que exportado va con valor agregado, donde la pulpa de celulosa explica dos tercios de ese valor agregado.

A su vez, la forestación es un rubro que genera mucho empleo, pues son 14.500 empleos vinculados directamente al proceso productivo, principalmente en las empresas forestales y sus contratistas, 5.000 empleos en silvicultura, 5.000 en cosecha y transporte y 4.000 en proceso de transformación industrial.

Capurro también reconoció que la cadena forestal aportó US$ 280 millones en impuestos, donde el 80% de los tributos en el proceso productivo son generados en forma directa o indirecta a través de contratistas.

El especialista de CPA Ferrere no pasó por alto que la cadena forestal permite un mejor aprovechamiento del recurso tierra, ya que el empleo, el valor agregado y las exportaciones del sector expresado por hectárea son superiores al de otros usos alternativos de la tierra.

La contribución de la forestación al resto de la economía uruguaya aumentará en los próximos años, porque la extracción de madera en 2016 fue menor que la cosecha potencial asociada a las 800.000 hectáreas plantadas.

Apoyo. A su vez, el presidente de la Sociedad de Productores Forestales, Carlos Faroppa, explicó que la realización del estudio tuvo como objetivo actualizar la información disponible sobre el sector y resaltó la importancia de hacerlo ahora ya que se cumplen 30 años de la aprobación de la Ley 15.939, mejor conocida como Ley Forestal.Esa legislación fue “el puntal fundamental para el desarrollo del sector, uno de los sectores más dinámicos del país”, afirmó Faroppa.

Por otra parte, el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Tabaré Aguerre, no sólo coincidió con la visión de Faroppa, también remarcó que no hay duda que fue “una política de Estado” y dijo que la forestación “es una actividad que se basa en una política de Estado que ha definido la utilización de los recursos naturales con criterio de capacidad de uso, y que se enfrentó con éxito a las exigencias de la certificación internacional”.

El jerarca de gobierno también consideró “interesante” que la una ley de 1987, perteneciente a una época en que no se hablaba de sostenibilidad, haya tenido capacidad de adaptarse a las nuevas necesidades de desarrollo. Somos un país estructuralmente caro y con desafíos importantes en materia de productividad, sobre todo del trabajo y con exigentes estándares ambientales. La forestación nos da un ejemplo y varias lecciones que aprender sobre desarrollo sostenible y manejo responsable de recursos”, afirmó el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca en el lanzamiento del trabajo.

Pablo Mestre
Pablo Mestre

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