Las exportaciones de lácteos uruguayos alcanzaron los 504,4 millones de dólares FOB acumulados a julio de 2025, lo que representa un incremento del 11% respecto al mismo período de 2024, según datos de la Dirección Nacional de Aduanas.
Leche en polvo entera, el motor de las ventas
El principal producto de exportación fue la leche en polvo entera, con ingresos por 333,2 millones de dólares, un crecimiento del 16% interanual. Solo en julio, este rubro generó 46,4 millones de dólares, consolidando su liderazgo. En volumen, se colocaron 83.252 toneladas, apenas un 1% más que en 2024, lo que refleja que el aumento de facturación respondió principalmente a la mejora de precios: el valor promedio se ubicó en 4.163 dólares por tonelada, un 15% superior al del año pasado y un 42% más alto que en diciembre de 2024.

Leche descremada y quesos, con resultados dispares
La leche en polvo descremada mostró una performance estable, con 31,6 millones de dólares exportados en lo que va del año, apenas un 1% más que en 2024. Sin embargo, el volumen embarcado cayó 4%, lo que fue compensado por un aumento de precios del 6% interanual.
El panorama es más complejo en los quesos, que acumularon 50,8 millones de dólares, registrando una caída del 22% en facturación y del 23% en volumen (10.227 toneladas). A pesar de que el precio promedio subió levemente (1%), no alcanzó para contrarrestar la pérdida en cantidades.
Manteca, la de mayor crecimiento relativo
En contraste, la manteca fue el producto de mejor desempeño relativo. Con ventas por 41,9 millones de dólares, logró un aumento del 21% frente a 2024. En términos de precios, se destacó con un valor promedio de 6.800 dólares por tonelada, un 22% más alto que el año pasado, lo que explica que, pese a una leve caída de 1% en volumen (6.368 toneladas), la facturación total se disparara.
El crecimiento de las exportaciones lácteas en 2025 está sustentado principalmente en la firmeza de los precios internacionales, en especial de la leche en polvo entera y la manteca, mientras que los quesos mostraron una retracción tanto en volumen como en facturación.
En un contexto de alta volatilidad del comercio internacional, Uruguay consolida así un desempeño positivo en su principal rubro agroindustrial después de la carne bovina, con un aumento de dos dígitos que aporta dinamismo a la economía nacional.