Apoyo permanente al desarrollo nacional productivo. Así se expresa en la tapa del libro por los 150 años de la Asociación Rural del Uruguay.
La obra, una producción editorial de Estudio Ponce de León & Zorrilla, con la coordinación del Ing. Agr. Gonzalo Arroyo, fue presentada ayer en presencia de Ministros de Estado, diversas autoridades y criadores.
El Dr. Gonzalo Valdés Requena y el Ing. Agr. Guzmán Tellechea Otero agradecieron los apoyos recibidos para la concreción de la publicación.
Cultura y Agro.
“Es un libro muy disfrutable de leer”, aseguró Pablo Da Silveira. El Ministro de Educación y Cultura afirmó que “contribuye a combatir un error conceptual que supone que la producción agropecuaria es un tema que sólo involucra a los productores”. Y agregó que lo es más en Uruguay. “Afirmar eso es de un profundo desconocimiento del país que somos, de cómo ha sido construido”.
El Ministro agregó que “la historia de este país, no se entiende si no ponemos en el centro a la producción agropecuaria”. Dijo que “desde la patria vieja hasta hoy, la producción agropecuaria está asociada al crecimiento económico, al desarrollo de los oficios, la introducción y desarrollo de tecnologías, la inserción del país en los grandes circuitos comerciales”. También lo vinculó, “a la construcción de caminería, de puentes, de vías ferroviarias, al nacimiento de poblaciones”. Y agregó que “la producción agropecuaria ha estado asociada al desarrollo de escuelas rurales, o a fenómenos tan valiosos como Mevir”. Así como a la vida universitaria y al desarrollo de la investigación científica”.
Da Silveira fue más allá y afirmó: “si queremos entender, no la historia de la producción agropecuaria, sino la historia del país, no se puede omitir ese protagonismo del sector”. Porque, dijo que “es difícil en Uruguay encontrar un área de la economía que no tenga nada que ver con el agro”. Y agregó que “contribuye a generar empleo, a mejorar los ingresos de muchas familias uruguayas”.
Desafío.
El ministro mencionó que la producción agropecuaria está cargada de conocimiento científico, e incorpora tecnología día a día. “Y todo esto genera interesantes horizontes, pero también desafíos respecto de cómo formar las futuras generaciones de uruguayos”. Esto, mencionó, “nos exige trabajo, creatividad y un cambio de mentalidad”. En ese sentido informó que en el Ministerio de Educación y Cultura están iniciando una línea de trabajo que vincula lo educativo con la ruralidad. “No se trata de pensar cómo formar a las nuevas generaciones de agropecuarios, sino de cómo incorporar el tema de la ruralidad en todo su conjunto, aspectos productivos, económicos, sociales, culturales y la formación integral de la formación de nuevas generaciones de uruguayos, desde primaria hasta la universidad”. Porque, aseguró, “la producción agropecuaria y la ruralidad son muy importantes como para que el sistema educativo les dé la espalda”.
El libro 150 años de ARU, cuenta con el apoyo de BROU, UTE, BSE, Antel, Ancap, INAC, ACG y diario El País.