Los granos estivales finalmente consiguieron muy moderados avances al cierre de este jueves, recuperando alrededor de la mitad de lo retrocedido el miércoles, después del informe bajista del USDA. El trigo terminó con caídas leves, pero manteniendo la tendencia bajista.
Las ganancias fueron a pesar de un dólar fortalecido este jueves, llegando a máximos de cuatro días, tras el impulso que le dio la victoria de Trump en las elecciones presidenciales de EEUU.
Las ventas de exportación semanal fueron aceptables para los tres granos principales, siendo inferiores frente a una semana atrás para la soja y el maíz, mientras que el trigo las superó. De todas formas, todos superaron los volúmenes promedio semanal necesarios para cumplir con el pronóstico anual de ventas del USDA.
Tras el reporte mensual del USDA, ahora las miradas empiezan a centrarse en el Mercosur, con algunas demoras en el arranque de la siembra en Argentina. Este jueves se sucedieron algunas ventas puntuales de exportación hacia diferentes mercados, como China para soja y Arabia Saudita para el maíz.
El maíz subió unos pocos centavos, recuperando parcialmente las pérdidas experimentadas en la sesión de miércoles. El contrato diciembre cerró por debajo de algunos promedios móviles, aunque llegó a posicionarse por encima de los de 50 y 100 días móviles.
La soja subió, recuperando alrededor de la mitad de lo perdido durante el miércoles, cerrando enero sobre los principales promedios móviles. Los pronósticos climáticos, ya con la cosecha terminada en EEUU, se direccionan hacia la siembra en el Mercosur, en donde particularmente Argentina está con problemas importantes de atrasos.
El trigo cerró mayormente en baja, incapaz de aprovechar la ola positiva para soja y maíz y trasladarla al trigo. Los negocios para exportación semanal resultaron mejor respecto a una semana atrás. El USDA aumentó el cálculo de producción de cosecha para el de origen europeo, mientras que dejó incambiados otros orígenes.
FIMIX – Agrofinanzas