Carolina Trivelli, Asesora Senior de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Análisis Estratégico e Innovación, visitó Uruguay en el marco de un trabajo regional que está realizando la organización con el objetivo de transversalizar la innovación y la adopción de soluciones digitales para favorecer la transformación de los sistemas agroalimentarios para que sean más eficientes inclusivos, resilientes y sostenibles.
En el marco de sus tareas se están analizando más de 20 proyectos para conocer su nivel de madurez digital y proponer acciones que favorezcan la digitalización. Entre estos 20 proyectos uno se está desarrollando en Uruguay, el de Ganadería y Clima .
-¿Qué es la innovación para la FAO?
-Trabajamos en base a una definición amplia del tema. Innovar es introducir cambios tecnológicos, institucionales, sociales, digitales en cómo trabajamos, sea a nivel de políticas o también de cambios en las prácticas de producción. Se hace mucha innovación al adaptar formas de producir de otros contextos, por ejemplo. A veces se trata incluso de adaptar –o volver a adoptar- prácticas ancestrales a nuevas situaciones o para hacer frente a desafíos productivos de hoy. La innovación se trata de eso: enfrentar desafíos para mejorar cómo trabajamos haciendo las cosas de forma distinta y novedosa.
-¿Qué iniciativas interesantes vé en Uruguay?
Uruguay tiene una gran fortaleza que reside en su estabilidad y fortaleza institucional y en una política de Estado que apuesta a la innovación. Además, Uruguay tiene muy buenas condiciones para la innovación gracias a su alto grado de conectividad. Sus características territoriales también ayudan, es un país pequeño con un alto grado de capacitación de su población, en el que se pueden probar muchas cosas antes de escalarlas y eventualmente adaptarlas a otros países de la región. De hecho, lo que se hace en Uruguay puede servir de ejemplo en otros lugares de América Latina y el Caribe. Iniciativas como la que analiza cómo implementar opciones de trazabilidad en la quesería artesanal , para apoyar a los productores en la mejora de su producción gracias a herramientas tecnológicas, que les permitan demostrar la calidad de sus productos, es muy interesante.
-Uno de los proyectos que están monitoreando en Uruguay, es el de Ganadería y Clima. ¿Por qué?
En la última Conferencia para el Clima (COP26) quedó de manifiesto la importancia que tiene la Ganadería Sostenible para la reducción de las emisiones de gases a efecto invernadero, así como la adaptación y la lucha contra el cambio climático. Este es precisamente un proyecto que genera lecciones e identifica como avanzar hacia esquemas ganaderos climáticamente inteligentes. Estas lecciones permitirían su posible expansión a escala mayor y pueden servir de referencia para el resto de la región. La idea es fortalecer las herramientas digitales de las que dispone para medir sus resultados y apoyar a los productores.
-Además del escalamiento ya mencionado, ¿qué otras perspectivas ve para el trabajo de la FAO acompañando la innovación agropecuaria en Uruguay?
Uruguay es un socio muy interesante en la discusión sobre cómo transversalizar la innovación y digitalización en el trabajo alrededor de la transformación de los sistemas agroalimentarios. Por ejemplo, los avances en innovación serán clave para lograr que el sector rural sea más atractivo, con más oportunidades para los jóvenes. Con la innovación surgen respuestas a una realidad rural que muchas veces no ofrece perspectivas inspiradoras para los jóvenes de hoy, que no buscan necesariamente tener la misma vida o hacer lo mismo que sus padres. Hay muchas oportunidades de añadir valor a la producción agroalimentaria y de generar emprendimientos relacionados con la provisión de servicios rurales. Las soluciones digitales abren nuevas oportunidades y Uruguay da cuenta de que es posible aprovechar esas oportunidades para lograr mayor inclusión social y económica en el medio rural. Por ello este país también es un ejemplo de innovación en la institucionalidad pública que da soporte a los esfuerzos innovadores de la academia, las empresas o las organizaciones de productores, por ejemplo.
