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Rodrigo Kent: "Siempre que podemos incursionamos en nuevos cultivos"

Es productor y pertenece a la tercera generación de una familia con tradición agrícola en Soriano. Rodrigo Kent dice que están cerrando una zafra con muchos costos que no estaban presupuestados, pero esperan “tener un buen año en cultivos de verano”. Hacia el futuro, Kent dijo que piensan seguir usando a la colza en las rotaciones de invierno, quieren implementar el riego para hacer maíz de primera y hay que apostar a subir considerablemente los rendimientos de soja.

Rodrigo Kent
Rodrigo Kent.
Rodrigo Kent.

¿Cómo ves la actualidad del negocio agrícola?

En nuestro caso, en la zona de Palmitas en Soriano, donde están nuestras chacras, vamos a cerrar un año positivo para la agricultura de verano. Tuvimos y estamos teniendo buenos rendimientos de soja y maíz, comenzando la cosecha de segunda de este último, y el panorama es positivo. Hay sobrecostos por la reparación de campos y la cosecha con humedad, ya que la soja se trilló en un 99% con humedad. Se cosechó muy poco con 14 o por debajo de 14, pero a grandes rasgos, esperamos tener un año bueno en los cultivos de verano.

¿Qué promedios de rendimiento van obteniendo en soja y maíz?

Maíz de primera hace tiempo que no sembramos nada. Volcamos nuestra producción a soja y maíz de segunda. En soja, los cultivos de primera promediaron 3100 kilos por hectárea y los de segunda unos 2750, así que esperamos tener un promedio general de 2900 kilos por hectárea, aproximadamente. El maíz de segunda lo empezamos a cosechar el lunes pasado, y en el arranque nos estaba dando unos 9000 kilos por hectárea. Hay que esperar a ver cómo se mantiene, pero esperamos cerrar arriba de 7 toneladas.

¿Cómo tienen calculado este sobrecosto? Especialmente entendiendo que la mayoría de la soja se ha cosechado con humedad…

En promedio habremos trillado entre 18% y 19% de humedad, y estamos terminando de cosechar semilla de soja con 20%, la cual también vamos a tener que secar. Nosotros tenemos planta propia, pero si nos guiamos por las tarifas de secado, que en este año además fueron un poco más elevadas de lo normal, capaz que son entre US$ 30 y US$ 40. A eso, hay que sumar la reparación de los campos. Pongamos entonces que hay que calcular el sobrecosto de US$ 30 o US$ 40 para arriba…

 

Te referís a la reparación de caminos, nivelación de chacras para el invierno, costo de combustible…

 

Y sí. Para poder sembrar invierno hay que hacer reparaciones. Los caminos durante la zafra estuvieron complicados para poder sacar el grano, las cosechadoras gastaron más combustible, los tractores también usan más combustible para acarrear el grano. En esta zafra todo tuvo un gasto extra.

¿Cómo se comportó el clima durante la cosecha en su zona?

Nosotros, como tenemos planta, nunca paramos de cosechar. Mientras que se pudo, estuvimos trillando, pero si miramos a nivel país , podemos decir que en esta zona fuimos los más favorecidos desde el punto de vista climático, sobre todo en época de cosecha, porque casi no tuvimos días parados. Algún que otro día fue necesario poner una pausa a las labores de cosecha, pero siempre por un lado o por otro pudimos reanudar los trabajos con rapidez.

¿De qué forma van vendiendo ustedes y armando la composición de precios?

Nosotros vendimos algo el año pasado, cuando estaba en US$ 440 o US$ 450. Después, tomamos posición en algo cercano a US$ 405 o US$ 410, y ahora terminamos vendiendo algo más a US$ 440 y otro poco a US$ 420. En definitiva, esperamos cerrar con un promedio de US$ 420 por tonelada en soja.

¿Cómo diseñan la estrategia de siembra de cultivos de invierno?

En nuestro establecimiento hay un esquema de rotación ya armado, que es más o menos con un 20% a 25% de colza, cebada y trigo, y el resto es la parte que va a cobertura después del maíz de segunda. Esto ya está estipulado por lo cual ya sabemos lo que se va a sembrar el año que viene, como dentro de 3 años. Sobre la marcha, algún campo que se retrasó con la cosecha que iba a colza se pasó a cebada, pero siempre tratamos de mantener la rotación y si la modificamos es por motivos climáticos, no tanto por una cuestión de mercados. Seguro que hay chacras este año que se pudieron cosechar a tiempo para empezar con la siembra de trigo, pero hay otros campos donde la trilla no terminó en fecha y se iba a sembrar colza, por lo tanto, pasamos a cebada. En líneas generales, tratamos de mantener el esquema de rotación con porcentajes similares de los cultivos todos los años.

¿Cómo han insertado a la colza en el sistema, más allá de los precios?

Lo hacemos en la rotación. Si hay un cultivo nuevo para meter en la rotación lo hacemos, y evaluamos el impacto. Si bien cada año vemos el número puntual de cada cultivo, y en este caso la colza no tiene una actualidad tan atractiva, capaz que sí vemos el plus en la soja de segunda, en una cosecha más tempranao en una mejor utilización de las herramientas. Hay que verlo en el global y no solamente en el propio cultivo en sí mismo. No en todos los años, pero en la mayoría nos da un plus en la soja de segunda atrás de la colza, y también volvemos a tener un beneficio importante en la cebada del año siguiente. Además, se puede sembrar antes que la cebada o el trigo. A nosotros nos calza bien porque se siembra en una fecha distinta, y se cosecha también en una fecha diferente, así como tiene un mercado distinto y le da una mayor diversificación a lo que hacemos. En resumen: tanto por precio como por fechas de siembra, fecha de cosecha, período crítico y demás, nos diversifica mucho el negocio y nos funciona.

¿Han probado otros cultivos como carinata, camelina o lupino?

Sí, nosotros siempre que podemos tratamos de incursionar en nuevos cultivos. Cuantos más cultivos tengamos, con más negocios diferentes, y siempre que dé la ecuación obviamente, mejor hacerlo por diversificación. En el caso de la camelina, este año vamos a hacer un área piloto: es una alternativa que nos entra bien en la rotación, tiene una fecha de siembra diferente a los otros cultivos, un momento de cosecha distinto y un mercado distinto, porque en este caso va atado al precio de la soja, al tiempo que la colza va en Matif, la cebada a trigo y el trigo al precio local. Te vuelvo a decir, de esa forma diversificamos y le quitamos riesgo al sistema.

¿Y en verano? ¿Girasol o sorgo suelen hacer además de la soja o el maíz?

Sorgo probamos hace algunos años. Mi padre hacía mucho antes. Probamos de nuevo, pero la diferencia de rendimiento y precio que tiene en esta zona con un maíz, no lo justifica. Por esa razón no sembramos más sorgo. Probamos girasol el año pasado de nuevo, pero tampoco se destacó. Este año el negocio de girasol cambió y no nos cerraba la ecuación y por eso no se sembró, pero siempre que podemos sembramos algún cultivo nuevo.

¿Rotan con ganadería o hacer sinergia con un feedlot?

Nosotros tenemos un feedlot en Risso. Arrancamos el negocio del encierro en un año complicado de calidad para el trigo, y lo tratamos de pasar a carne para darle más valor. Desde allí, empezamos esta sinergia entre granos y carne. Lo hemos ido agrandando y la idea este año, si no sube el precio, es pasar todo el maíz a carne. En caso de que suba el precio, no lo usamos en el corral, cerramos y vendemos, pero siempre tenemos esa herramienta. Después, tenemos algo de ganadería a campo, pero 100% mejorado, con alfalfa en parcelas.

¿Usan el riego en los cultivos o pasturas?

Estamos en vía de hacer algunos proyectos, pero todavía no se ha concretado nada. El maíz es el cultivo que mejor responde, sobre todo en el de primera. Nosotros no hacemos maíz de primera en secano, pero si tuviéramos riego, probablemente lo haríamos. Estamos en ese proceso, con algunos proyectos.

¿Utilizan seguros agrícolas?

Sí, usamos seguros desde el año 2016/17. Fuimos tomando seguros de inversión en su momento, y ahora de rendimiento. Todos los años tratamos de usarlos, y en los casos en los que no podemos acceder a seguros de rendimiento, como en los cultivos de invierno, tomamos los seguros tradicionales. Hubo años en los que los seguros fue lo que nos permitió seguir en pie. El año pasado en Soriano sacamos 600 kilos por hectárea, y teníamos un seguro que iba hasta 1600 o 1700 kilos. Sin dudas que sí, cuando hay un año malo es cuando te acordás que lo tenés. Este año en particular el costo del seguro subió y los kilos asegurados fueron bastante menos, pero pienso que deberíamos intentar seguir tomándolo y tratar de mejorar las condiciones.

Visto que ustedes pertenecen a una familia con historia en la agricultura, pero componen una nueva generación. ¿Cuáles ven como los principales desafíos?

Somos tres hermanos que ya somos la tercera generación, y en estos últimos 3 o 4 años hemos puesto nuestra impronta, adquiriendo nuevas tecnologías, como por ejemplo maquinaria con un nivel superior al que teníamos antes y la verdad que se nota. Las diferencias están a la vista, tanto en el rendimiento de los cultivos como en la eficiencia de las herramientas. Estamos tratando de “buscarle la vuelta” para mejorar los rindes. En maíz lo venimos logrando y en cultivos de invierno también, pero en soja parece que estamos más estancados, porque estamos obteniendo, en muchos casos, los mismos rendimientos que tenía mi padre cuando recién empezó a sembrar. En Estados Unidos, año a año aumentan las producciones en soja, más que en maíz. En Brasil también vienen aumentando en comparación con ellos mismos. Nosotros venimos “planchados”, y pienso que nuestro foco debería estar ahí en maximizar esos rendimientos, porque además de esto la soja es nuestro cultivo principal.

Para cerrar. El clima ha sido extremo en las últimas zafras, y sobre todo, demasiado variable. ¿Qué estrategia han adoptado para defenderse de esto, o al menos, reducir los riesgos?

Una de las cosas que hemos hecho es la diversificación, como te comenté. El último año, si no hubiéramos hecho los cultivos de invierno y quedábamos 100% dependientes de los cultivos de verano, cerrábamos el peor año de nuestra historia. Fue en parte el doble cultivo lo que nos ayudó a reponernos. Por otro lado, hay que intentar hacer todas las labores en tiempo y forma, y de ese modo reducir el margen de error. El año pasado fue el peor de la historia, pero en este vamos a andar muy bien productivamente y esto es gracias a que se realizaron los trabajos en fecha y captamos el buen clima. Esto ayuda mucho, porque si arrancás mal, y encima después te toca un año malo, no lo revertís.

Será del 25 de agosto hasta el 6 de setiembre en Estados Unidos

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