La operativa de este viernes en Chicago fue prácticamente de estabilidad absoluta, con la soja cayendo marginalmente, así como los cereales pero con signo contrario. El fin de semana extendido por el feriado del día del trabajo en EEUU el próximo lunes 7, alimentó la aversión al riesgo y el repliegue de posiciones, para mantenerlas en el mínimo imprescindible. La ausencia de China de los mercados durante jueves y viernes, parece haber disminuido, al menos parcialmente, la exposición a la volatilidad y al riesgo.
El reporte del mercado laboral estadounidense resultó alentador, pese a lo que alimentó el pesimismo respecto a una pronto suba de tasas de interés por la Reserva Federal, durante la última rueda de operaciones semanales. Así, las órdenes de venta se impusieron, haciendo caer acciones, crudo y demás energéticos, metales, granos y hasta al dólar.
Los cultivos de verano se encuentran en la última curva previa al arranque de la cosecha y su efecto se hace sentir sobre los precios, ya deprimidos de por sí.
El maíz subió, aunque marginalmente. Este jueves vio compromisos de exportación semanales de un tercio vs lo negociado una semana antes, lo que se agregó a la tendencia semanal de valores que ya traía.
La soja volvió a ser incapaz de mantener las ganancias generadas más temprano, con el contrato de Noviembre – referencia para la cosecha de EEUU – cayendo a mínimos de un mes. Se ve cada vez menos ventas en el mercado disponible estadounidense, con los Farmers retirados y concentrados en tener todo pronto para entrar a levantar las chacras en los próximos días.
El trigo cerró al alza si bien, igual que el maíz, terminó la semana con caídas en medio de una situación de sobresaturación de los mercados mundiales.
FIMIX – Agrofinanzas
