Es productor lechero de Florida, forma parte de la tercera generación familiar que está en el sector desde la década del 40. En el año 1975 comenzó como tambero, y desde 1985 participa en la directiva de la Sociedad de Productores de Leche de Florida, gremial que presidió dos veces en el pasado, y hoy le toca hacerlo por tercera vez. Se muestra optimista con el sector para adelante, y sostiene que se está usando este año bueno en materia de precios y de productividad, para ir tapando los anteriores: dos sequías, una de ellas muy fuerte y un exceso hídrico que bajó la remisión y pegó duro en la economía de los tamberos a nivel país.
—¿Cuál es la situación actual de la lechería?
—Estamos en un año muy especial, prácticamente desde todo este ejercicio, porque arrancó con un verano bueno, que dejó muy buenos rendimientos en los cultivos, y luego tuvimos un otoño muy bueno, con las aguas justas, con mucho pasto y se está redondeando una situación muy favorable para la lechería, por el precio internacional, que más allá de la baja de ahora, vamos a cerrar con la leche por encima de US$ 0,40 por litro. Además, para nosotros los granos están en buenos valores, lo compramos en US$ 260 seco y US$ 220 húmedo, lo que deja una muy buena relación con el precio de la leche. Están todos los astros alineados, aunque siempre estamos preocupados.
—¿Por qué?
—Porque no nos olvidamos de lo que sucedió en 2008 y en 2014, donde había un escenario parecido, y los predictores indicaban años de buen pasar para la lechería, porque la población mundial tenía hambre y plata, y esto es un alimento importante, pero se retiró China del mercado y el precio se nos vino a US$ 0,30. Además tenemos lo que pasa a nivel mundial todos los días, por ejemplo que Estados Unidos le quiere poner un 50% más de aranceles a Brasil, y cada cosa que le pase a Brasil nos pega coletazos a nosotros. Por otra parte, este año lo que estamos haciendo es cubrir los dos años anteriores, que fueron muy duros: el primero por la sequía, donde tuvimos que gastar dinero que no teníamos, comprando reservas caras y de mala calidad; el segundo por el exceso de lluvias y eso nos complicó en la producción, en mi caso personal cayó en un 10%, lo que dejó un escenario de deudas que las vamos tirando unos años para adelante.
—Luego de la baja del año pasado, ¿este año cómo viene la remisión de leche a planta?
—Viene bien, se estima que estamos entre un 10 y 15% por encima del año pasado, en mi caso personal es un 10%. El tema es que lamentablemente en la lechería se tapa un año con el otro, cuando el tambo se maneja con la caja, después las cosas se complican.
—Con el tipo de cambio actual que ha tenido vaivenes, ¿cómo queda el precio que reciben por la leche remitida?
—Eso es importante, cuando hablamos de que recibimos por encima de US$ 0,40 hablamos de un dólar que tiene sus problemas, a nosotros en lo inmediato nos favorece, porque tenemos más del 70% de los insumos y deudas en dólares, ahí nos favorece que el dólar no esté muy alto, pero sabemos que eso es un engaño, porque a la larga siempre nos va a ir en contra, porque la industria exporta en dólares y el tipo de cambio bajo la complica, debido a los gastos que tiene en peso.
—¿Cómo ve la situación de las industrias lácteas en nuestro país?
—El escenario de la industria es muy complejo, prácticamente el 90% de las que reciben leche están pasando una situación complicada. Tenemos lo que sucedió en Calcar hace unos meses, que por suerte aparentemente ahora está funcionando, es muy complejo también lo de Coleme, y así en todas menos en Conaprole. Como productor lechero y gremialista tengo que estar conforme cuando hay muchas bocas de salida, lamentablemente hay varias industrias que van a tender a desaparecer, por tener muy poca leche, y varias cosas le empiezan a pesar como los salarios.
—¿Cómo ve el cierre de la planta de Conaprole en Rivera?
—Yo no remito a Conaprole, aunque sí en la Sociedad de Productores el 90% son remitentes a la cooperativa, y en esta semana estuvo el presidente Gabriel Fernández, y nos manifestó que van a cerrar esa planta porque recibe poca leche. Por lo que planteó Fernández, nadie queda sin trabajo se reacomodan a los trabajadores, y los productores seguirán remitiendo leche de forma normal, es muy complejo tener una planta abierta si recibe tan poca leche.
—¿Hoy hay una situación de poca competencia a nivel industrial?
—No lo sé, pero insisto en que es bueno que hayan varias bocas de salida, eso es muy importante. Hay que ver un poco la historia y lo que sucedió hace 25 o 30 años, cuando apareció Parmalat en Uruguay, y toda la industria uruguaya ponía el grito en el cielo, porque venían a comerse a las industrias locales, pero eso generó que por ejemplo Conaprole se modernizara y se convirtiera en una industria de primer nivel, entonces la competencia es buena para el productor, pero también le sirve a la industria. Siempre tiene que haber competencia.
—Con el gobierno que asumió, ¿cómo ha iniciado el relacionamiento?
—Bien, hemos estado en diálogo con el ministro Alfredo Fratti y con el subsecretario Matías Carámbula, también con el Instituto Nacional de Colonización, tanto con Eduardo Viera en su momento, así como también con Alejandro Henry, quien nos va a visitar la próxima semana, ya que somos usuarios muy importantes de Colonización, en la gremial tenemos un campo de más de 4.000 hectáreas desde hace más de 35 años, y siempre hemos tenido buena relación, a pesar de algunas discrepancia que tuvimos hace 10 o 15 años, por algunas cosas que tiene que cambiar el Instituto, hay mucho campo que a veces no produce bien, y estos son los temas que vamos a estar charlando con Henry la próxima semana.
—¿De qué forma se ve que el gobierno a través de Colonización pretenda comprar unas 25.000 hectáreas para lechería?
—Si el gobierno compra tierra pensando en la lechería lo apoyamos, estamos a favor de eso. El 80% de los productores lecheros son pequeños y medianos, de unas 100 y pocas hectáreas, y el 50% son arrendatarios, si esos productores se pudieran instalar en los campos de Colonización sería fantástico, porque ese perfil de productor se está yendo de la lechería, y una de las causas son los arrendamientos, entonces es importante este tema. En Florida hay un par de colonias, allí lo que le manifestamos al instituto es la forma en la que avanzan las mismas, no estamos de acuerdo el tiempo que les lleva iniciarse, por ejemplo.
—¿Qué opinión le merece la compra de María Dolores?
—No queremos opinar porque no estuvimos en el tema, incluso en nuestra gremial no formamos parte de un comunicado que salió de las gremiales, porque pensamos que era un tema muy político, pero de todas formas apoyamos el comunicado, pensamos que no era el momento para la compra, si bien son 4.400 hectáreas a 10 kilómetros de San Ramón y 15 kilómetros de Florida, no sé si era el campo ideal, habría que analizarlo más, pero en principio creo que no, aunque el punto sea sensacional. Hoy hay que apoyar, pero vemos con preocupación que el tiempo pasa, y si ese negocio se hace, Colonización debería de empezar a pensar en las hectáreas agrícolas para ya empezar a quemar para poder hacer algo en este verano.
—¿A ustedes como gremial les interesa participar en ese campo con el banco de forrajes?
—Sí, creo que Colonización se tiene que apoyar en todas las gremiales, ya que tienen experiencia, por ejemplo la de San Ramón hace años que trabaja con un banco de forrajes y ha tenido una experiencia muy buena. Esto también lo atamos al proyecto que largamos el año pasado del tema riego hacia la lechería, nosotros tenemos una experiencia en el campo de recría de hace unos años donde se hizo una represa con el fin de darle agua a los animales, y en ese paquete venía un riego para 40 hectáreas, de lo cual no estábamos muy convencidos porque en el campo la piedra estaba a 20 centímetros, pero la sorpresa es que unos años después estamos sacando en promedio entre 13.000 y 14.000 kilogramos de grano por hectárea, entonces en todas las gremiales que tienen campo, debería de haber proyectos así.
—Entonces el costo beneficio ofrece una oportunidad para el sector…
—Sí, por supuesto, estamos hablando de que un riego anda en US$ 4.000 por hectárea, en el caso de la Sociedad, cuando hablamos de poder regar 1.000 hectáreas es muy difícil tomar un crédito de esa magnitud, entonces es necesaria una mano del gobierno.
—¿Llama la atención que el gobierno tenga como prioridad a la lechería pero aún no se haya aprobado el descuento en la tarifa de UTE?
—Sí, es algo que venimos peleando, pensamos que iba a ser más fácil, hubo alguna reunión de las gremiales con gente de UTE pero no con el directorio, creo que habría que ir más arriba, o sea en la parte política, es algo importante para nosotros y para la industria.
Nuevamente se tira leche por un paro
—Otra vez a raíz del paro de Conaprole se llegó a la situación de tirar leche, como circuló en las redes sociales a través de distintos videos, ¿cómo ve este hecho?
—Esto es un tema grave y preocupante, por varios sentidos: primero porque se ha tirado una materia prima de primera necesidad, y segundo que con Dinama hoy no se puede tirar leche.
—¿Qué corresponde hacer en estas situaciones?
—Frente a estos casos lo que hay que hacer llamar a un escribano y certificar esto a través de un acta, además hay que filmar.
—¿Esta situación de qué forma impacta?
—Estas cosas siempre terminan impactando en el precio de leche al productor, el que paga siempre es el productor. Es una pena y no es la primera vez que pasa, esperemos que se solucione.
Ganado gordo también ayuda en la lechería
—Hoy el ganado gordo atraviesa un buen momento con un novillo por encima de los US$ 5,00, ¿cómo se refleja en el ganado lechero que se envía a faena?
—En este sentido también se han alineado los astros, hoy una vaca de refugo vale arriba de US$ 1.000, lo cual es un buen valor, y si alguno quiere criar un novillo también anda en esos valores, esperemos que eso se mantenga. También tenemos las exportaciones de ganado lechero en pie, salieron terneras a Turquía en dos barcos, y hay posibilidad de alguno más, eso mejoró mucho el valor de esa categoría, y la vaquillona también se está comercializando.
—¿Turquía puede llegar a ocupar el lugar que tuvo China en su momento? —No sé si saldrá el volumen que salía en su momento a China, eso es muy difícil de poder igualar. Hoy China no está llevando nada.