El mercado de haciendas atraviesa semanas muy atípicas. A la distorsión que normalmente se genera por la llegada de Navidad y Año Nuevo, se suma la prolongación del conflicto entre la industria y la FOICA, donde los paros sorpresivos están perjudicando la concreción de muchos negocios.
Más allá de esta situación puntual, Walter Hugo Abelenda, director del escritorio con su mismo nombre, se mostró ilusionado con el futuro, diciendo que “los analistas que uno escucha son optimistas en cuanto a un fuerte consumo para el próximo año y menor producción por diferentes razones”.
El mercado recuperó dinámica y Uruguay ha sorteado la gran dependencia de China con otros destinos, pero “como la felicidad no es completa, los paros están distorsionando el funcionamiento, esperamos que sea transitorio y se pueda solucionar”.
Sobre las últimas semanas, Abelenda dijo que tuvimos “una primavera de película, en general en el país hubo abundancia de pasto y una demanda firme”, tanto por la industria como por la exportación, lo que da sustento al mercado.
Acerca del año, el consignatario expresó que arrancamos con un dólar bajo, muy dependientes de una China “quieta y apática” y con un Brasil “agresivo en la oferta”. De a poco el mercado se fue regularizando, “la Niña no fue tan grave como se manifestó”, el dólar se ha ido recuperando y la fluidez de negocios permite concluir que fue “un año bueno”, afirmó.
Para cerrar, Abelenda se refirió a la operativa de la última semana: “algunos paramos la operativa porque no tiene sentido esta incertidumbre, los valores siguen firmes, con el novillo arriba de US$ 4,00 y la vaca encima de US$ 3,80, pero con un mercado muy disímil”, cerró.