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Commodities demandados en las próximas décadas por crecimiento demográfico, tensiones geopolíticas amenazan el mercado

El consultor Luis Romero Álvarez realizó una disertación en Agro en Punta sobre los aspectos que inciden en el movimiento de los precios de las materias primas y la energía

Agricultura.
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Agricultuber.

Una de cal y una de arena. Así parece ser el futuro del mercado en materia de precios y oferta. La demanda crece y eso es estructural, pero las tensiones geopolíticas complican el panorama. En el marco de Agro en Punta, el consultor internacional Luis Romero Álvarez brindó una conferencia sobre las fuerzas que moldearán la oferta y la demanda de materias primas en las próximas décadas. El consultor dio un diagnóstico claro: el mercado permanecerá tenso y con una tendencia de precios al alza, aunque con fluctuaciones marcadas por diversos factores.

"Vamos a tener un mercado de commodities con precios en promedio buenos, con momentos de alza y baja, pero con una tendencia positiva en las próximas décadas", explicó Romero Álvarez. Sin embargo, advirtió sobre dos grandes desafíos que podrían alterar este panorama: el impulso de China hacia el autoabastecimiento y el fortalecimiento de las relaciones del gigante asiático con Rusia, que podría modificar los flujos comerciales a nivel global.

El consultor destacó que la decisión de China de invertir para producir más alimentos en su propio territorio para reducir sus importaciones es uno de los grandes cambios que se dieron en los ultimos tiempos. "Nunca había sucedido que China buscara el autoabastecimiento de manera tan explícita, y cuando lo incluyen en su plan quinquenal, significa que lo van a hacer", indicó.

A su vez, el fortalecimiento de las relaciones entre China y Rusia podría consolidar un intercambio estratégico de energía y alimentos a través de vías terrestres, lo que disminuiría la dependencia china de las importaciones marítimas que provienen de este lado del mundo. "En un escenario de conflicto geopolítico, esta estrategia reduce su vulnerabilidad", agregó.

El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca también fue tema de discusión. "Trump ha sido claro: China es un adversario. No se trata de cortar relaciones comerciales, sino de limitar la transferencia de tecnología y el acceso al mercado estadounidense", explicó Romero Álvarez.

Este nuevo orden global obliga a los países a tomar posiciones. "Ya no estamos en el mundo del multilateralismo post Segunda Guerra Mundial. Hoy hay que elegir cómo posicionarse en este tablero", subrayó.

A pesar de las tensiones, Romero Álvarez dijo que la demanda de alimentos seguirá en crecimiento, impulsada por el aumento de la población mundial. "Vamos camino a los 9.000 millones de habitantes antes de 2050, pero la oferta no está creciendo al mismo ritmo", afirmó. Entre los factores limitantes mencionó la pérdida de tierras cultivables, la erosión de los suelos y las restricciones ambientales, entre otras.

"La tecnología sigue ayudando a aumentar la productividad por hectárea, pero a tasas decrecientes", advirtió. Esto significa que, si bien los precios seguirán teniendo ciclos de alzas y bajas, la tendencia de largo plazo apunta a valores sostenidos en niveles altos.

Romero Álvarez se refirió al papel de Europa en este nuevo escenario. Destacó que, históricamente, ha sido un destino clave para las exportaciones agropecuarias de Uruguay, aunque las políticas de subsidios han limitado su apertura comercial.
"Si Europa avanza en reformas y reduce su proteccionismo, podría convertirse en un mercado aún más relevante para nuestros productos", explicó. En este sentido, subrayó la importancia de la firma del acuerdo Mercosur-Unión Europea, que podría abrir nuevas oportunidades para los productores uruguayos.

El consultor sostuvo que el mercado global de commodities enfrenta un futuro desafiante, pero con oportunidades para los países que sepan adaptarse. Uruguay debe enfocarse “en mejorar su competitividad, diversificar mercados y reducir costos internos para capitalizar este escenario cambiante”, explicó. "Tenemos muchos deberes pendientes, pero el mundo va a seguir demandando alimentos y Uruguay está en una buena posición para aprovecharlo", agregó.

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