Con negocios muy ágiles, bajo el martillo de Carlos Pagés Pineda, con el apoyo de su hijo Juan Carlos y el resto del equipo, se dispersó el 100% de la oferta.
Pablo D. Mestre
A ritmo de vértigo escritorio Pagés Mañay Negocios rurales dispersó, en La Rural de Dolores , los 1.600 vacunos que pasaron por la pista en menos de una hora. Con un muy buen marco de público y haciendas de gran categoría sumado a los buenos plazos para el pago otorgados, al decir de Juan Carlos Pagés “fue un rematazo”.
Algunos de los valores más destacados, expresados en dólares, fueron: terneros destetados y enteros: 490, 320 y 482; terneras: 445, 385 y 420; novillos: 550, 450 y 535; vaquillonas: 535, 440 y 515 y 50 vacas para invernar nuevas en US$ 542 cada una.