En su casa, como le gusta recibir a Miguel Viganó De Narváez, con la presencia de un buen marco de compradores y amigos, se concretó el remate anual de cabaña El Cerro, en donde se dispersó la totalidad de la oferta de Senepol, Senangus y Red Angus, bajo la conducción del escritorio Indarte y Cía.
Previo a los negocios, hubo lugar para el análisis y festejo, pues en el marco de la década de Senepol en el país, el Ing. Agr. Álvaro Simeone, presidente de la Sociedad de Criadores, realizó una puesta a punto de los factores que la distinguen y la han posicionado en la ganadería nacional.
Ya en la venta, bajo el martillo de Walter Hugo Abelenda, secundado por Gonzalo y Fernando Indarte, así como demás integrantes de la firma, se comercializaron primero los Senepol, de pedigree que encontraron a una demanda activa. El primer toro fue adquirido por el Ing. Agr. Tabaré Aguerre, ex ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, que pagó US$ 4.800. Los cinco ofertados y vendidos hicieron un promedio de US$ 3.660, con el citado valor máximo y mínimo de US$ 3.120.
Los 11 toros Red Angus PI, se subastaron entre US$ 3.360 y 3.240, haciendo un valor promedio de US$ 3.305. Y los 22 Senangus, un promedio de US$ 3.176, con máximo de 3.240 y mínimo de US$ 2.760, promedio US$ 3.100.
Además, se comercializaron 14 terneras Senangus: 840, 552 y 696; 12 piezas de cría Senangus: US$ 540 cada una; 14 vaquillonas preñadas: 972, 900 y 936 y 14 vacas preñadas: 1.080, 984 y 1.011.
Tras la subasta, Miguel Viganó De Narváez se mostró conforme, pero no sólo con el resultado de la misma, sino porque “estoy convencido del aporte del Senepol para mejorar el rodeo, le hace bien a la ganadería uruguaya”.