Mediados de noviembre suele ser un momento del año de flojedad en los precios del ganado a faena, con un aumento de la oferta que ejerce presión a la baja sobre los precios. Sin embargo, no es el caso este año. La finalización de la ventana de cuota, el regreso de los equipos kosher, precios de exportación a China en alza, una oferta que sigue siendo escasa y condiciones forrajeras prácticamente ideales en la mayor parte del país conforman un escenario de gran firmeza para el mercado del ganado gordo.
“Va a ser un buen final para el año”, resumió un intermediario. Aunque sigue habiendo disparidad en la postura de las plantas, en general las referencias de precios están en alza. Los novillos especiales, con carcasas de más de 280 kilos -que es la categoría más escasa- se venden entre US$ 4,05 y US$ 4,10 el kilo carcasa. A su vez, algunas de las plantas que pretendían mantenerse por debajo de los US$ 4,00 por novillos gordos buenos, se adecuaron a las condiciones del mercado y pagaron ese precio. Los novillos gordos típicos para el mercado interno, más livianos, también gozan de muy buena demanda y se venden a US$ 4,00.
Para las vacas gordas el mercado tiene un piso de US$ 3,75 para carcasas de hasta 230 kilos y llegan hasta US$ 3,85 o algún centavo más para las de más de 250 kilos. La demanda también es intensa por vaquillonas, con el abasto ofreciendo US$ 3,95 el kilo para las gordas especiales livianas.
Las entradas a planta en general están cortas, no más de una semana.
El grueso de la ventana de cuota 481 ya culminó, por lo que hay frigoríficos que vuelven al mercado por animales provenientes de pasturas y advierten que la oferta, a pesar del avance de la primavera, sigue siendo escasa. “Sigue sin haber ganado pronto”, resumió un intermediario, aunque aclaró que no se especula con el momento de venta, quien tiene ganado preparado, lo comercializa.
La expectativa es que el mercado siga firme tanto por las condiciones de oferta así como de la demanda.