La Sociedad Criadores de Shorthorn concretó este miércoles 15 su remate anual en la Rural de Durazno, con un marco de agilidad y firme demanda. Bajo el martillo de Escritorio Aramburu, la jornada culminó con la colocación del 100% de la oferta y un resultado que marcó una suba del 23% respecto al año pasado.
Los toros lograron un precio máximo de US$ 4.200, un mínimo US$ 2.640 y promediaron US$ 3.210.
Terneras: máximo US$ 720, mínimo US$ 564, promedio US$ 642.
Vaquillonas: máximo US$ 1.500, mínimo US$ 900, promedio US$ 1.066.
El remate mostró un mercado firme y compradores decididos, aunque quedó la sensación de que “faltaron toros” para cubrir la demanda.