Dr. Alberto González Buceta. Director de Frigorífico Las Piedras.
1) ¿Cómo evalúa el momento actual del rubro ovino en general?
- La carne ovina ha pasado por varias instancias en el último tiempo. Hasta hace 3 años teníamos más que nada como destino a Brasil, concentrando nuestras exportaciones en el Mercosur. Con el advenimiento de la demanda china eso cambió y ahora dependemos mucho de ese mercado, y con el momento actual China dispone mucho de lo que sucede. Hay una depresión muy grande ahora luego del año nuevo chino, y existe alguna posibilidad de reflotar algún negocio… Veo complicado el tema debido a la dependencia de China, ya que si empuja o tracciona al rubro le va bien, pero lo mismo pasa en los momentos en los que no hay tanta actividad proveniente de ese mercado.
2) ¿Cómo evalúa la situación para la carne ovina, a nivel de demanda y de mercados?
- La carne ovina se ha transformado en una carne más bien de consumo elitista, más a nivel de restaurante y no a nivel familiar. En la demanda vemos que antes la Unión Europea era un mercado importante y hoy no lo es, lo vemos en que en los últimos 3 años sobró cuota ovina en nuestro país, algo que nunca había acontecido desde que tenemos esa disposición. Esto demuestra a las claras que el rubro en ese mercado no pasa por una buena situación, y además la comercialización a nivel internacional se realiza en porcentaje elevado en carne ovina con hueso. Es difícil procesar ovinos, es caro y hay que desosarlos, por lo cual no solo lo vendés más barato que con hueso, sino que además el consumidor está acostumbrado a consumirlo con hueso, lo prefiere así.
3) ¿Qué espera para el 2023 y cuáles considera que son los principales desafíos dentro de la carne ovina?
- Nosotros debemos exigir como complejo cárnico una inserción para la carne ovina con hueso. No puede ser que tengamos que inventar un compartimento, cuando entendemos que en carne ovina Uruguay ya es un gran compartimento. No existe circulación viral, y no ha habido episodios de aftosa en ovinos en el último tiempo, ni en 2001, por eso deberíamos ser más insistentes en que nuestras autoridades sanitarias nos den la posibilidad o esperanza de que van a estar negociando en todos los mercados de destino la inserción de cortes con hueso. A nosotros nos toca competir con 2 “monstruos” como son Nueva Zelanda o Australia, y ellos tienen “piedra libre” en todos los mercados accediendo sin restricciones sanitarias. Es el gran desafío.