
La zafra de soja 2025 cierra con altos rendimientos por un lado, pero como contrapartida tiene precios que no llegan a colmar las expectativas. De todos modos la oleaginosa cierra con números, en promedio, positivos.
Enrique Carlos Oyharzábal, presidente de la Asociación Agro-Pecuaria de Dolores, en diálogo con Valor Agregado de Radio Carve, dijo que “el rendimiento físico fue muy bueno, en mi caso el tercero mejor en la historia de la empresa. Eso compensa el precio, que quedó por debajo de lo esperado”, sostuvo.
En la zona núcleo agrícola, que abarca Dolores, Mercedes, Río Negro y parte de Flores, los rendimientos promedio se ubicaron entre 3.200 y 3.300 kilos por hectárea. Según Oyharzábal, los precios de venta se movieron principalmente en torno a los US$ 360 por tonelada, aunque con variabilidad según las herramientas comerciales utilizadas por cada empresa.
“Hubo quien cerró algo a US$ 370, otros a US$ 350, cada productor manejó su estrategia”, explicó y agregó que el productor va a cerrar este año como positivo, “va a ganar algún dinero”.
El resultado económico general para la soja fue favorable, al tiempo que Oyharzábal destacó que “el número más lindo del año” podría llegar desde el maíz de segunda, que promete buenos resultados. Actualmente, el maíz húmedo se comercializa entre US$ 180 y US$ 190 por tonelada, puesto en destino, agregó.
Respecto a los cultivos de invierno, en momentos donde se empieza con los trabajos de siembra, Oyharzábal alertó sobre un inicio dificultoso: “Estamos atrasados. Lo que se sembró temprano viene muy sufrido por falta de nitrógeno, frío y exceso de agua”. Aun así, expresó optimismo: si bien parte de las siembras actuales están fuera de fecha, “la buena calidad de implantación puede compensar ese retraso”.
Finalmente, subrayó la importancia del doble cultivo, tanto por razones agronómicas como sociales: “Hace girar las rotaciones, mantiene operativas las plantas y genera empleo. Apostar a eso es fundamental para que la agricultura no se detenga”, cerró.