Argentina dio un paso clave hacia la diversificación de sus exportaciones. Con la habilitación oficial para exportar ganado en pie, el sector público y privado trabaja en la apertura de mercados y la firma de protocolos sanitarios, con Israel como destino prioritario.
Fernando Molinari, directivo de la Asociación de Exportadores de Ganado en Pie de Argentina, explicó en entrevista con Valor Agregado que la organización comenzó a operar incluso antes de la habilitación formal. “Trajimos al presidente de la asociación brasilera a Rosario y dimos un curso con toda la cadena de valor. Sabíamos que la apertura iba a llegar, porque no había forma de sostener la restricción”, relató.
Molinari destacó que esta modalidad de exportación “genera arraigo en el campo profundo” y permite al productor acceder a una doble vía comercial: el mercado interno o la exportación. “Cuando el negocio es rentable, el productor reinvierte. Esto es trabajo real en el campo”, subrayó.
Israel y Marruecos en la agenda
Argentina cuenta actualmente con 15 protocolos sanitarios vigentes para exportar animales vivos a países como Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Chile, Uruguay y Brasil. No obstante, Israel aparece como un objetivo prioritario. “Tenemos una relación política excelente. Ya enviamos un borrador de protocolo a las autoridades israelíes y estamos esperando que lo formalicen. El Senasa de Israel es muy exigente, pero confiamos en lograrlo”, indicó Molinari.
En paralelo, también hay expectativas en Marruecos, donde los acuerdos ya están vigentes, aunque aún dependen de factores logísticos y de precios. Turquía, que representa el 90% del mercado de Uruguay, aún no tiene protocolo con Argentina, pero la asociación lo está gestionando activamente.
Consultado sobre la estrategia argentina, Molinari fue claro: “Nosotros admiramos lo que ha hecho Uruguay en estos 15 años. Apuntamos a ese modelo, donde muchos productores son también exportadores. El modelo brasileño, en cambio, está centrado en empresas grandes. Nosotros queremos que la plusvalía quede en el campo”.
Además, destacó que Argentina tiene una gran oportunidad con animales de razas británicas como Angus y Hereford, e incluso con razas cruzadas o animales holando, menos valorizados en el mercado interno pero con potencial como nicho exportador.
Uno de los desafíos actuales es logístico. “Hay traders con barcos propios, lo cual es clave. Sabemos que se están construyendo al menos cuatro barcos nuevos para este tipo de comercio”, afirmó Molinari. Sobre las críticas al bienestar animal, fue tajante: “Eso no se negocia. En Argentina hay mucha ignorancia sobre el tema, por eso desde la asociación hacemos mucha docencia”.
También reveló una oportunidad perdida por falta de recursos humanos: “Nos ofrecieron un negocio de 7.000 caballos criollos mansos para África, pero no tenemos domadores disponibles. Se fueron del campo. Querían traer seis domadores gauchos desde Brasil”.
Repercusiones por la postura uruguaya
El directivo también se refirió a la reciente polémica en Uruguay en torno a las declaraciones del ministro Fratti sobre la exportación en pie para faena inmediata. “Generó muchas consultas hacia Argentina. Fue un error no forzado que metió ruido en la política uruguaya. Nosotros recién empezamos y Uruguay tiene un camino impecable recorrido. Pero esto despertó mucho interés, especialmente por los gordos de 400 kilos, donde hoy Argentina es más competitiva en precio”.
Finalmente, Molinari destacó que la exportación en pie “vino para quedarse” y que están pensando en el mediano y largo plazo. “No nos apuramos. Vamos a trabajar desde puertos como el de Ibicuy, en Entre Ríos, que está muy cerca de Uruguay. Ya vamos a invitar a nuestros amigos uruguayos a conocerlo”.