Uruguay debe ser muy cauto con sus declaraciones; lo que está pasando en Brasil forma parte de un proceso constitucional y no un golpe de estado.
Nota a Ricardo Reilly Arrarte, presidente de la ARU, Mvdeo., ND 20160218, foto Ariel Colmegna
“El Mercosur se destruyó por darle una utilización totalmente diferente a los fines para los cuales fue creado”, aseguró Ricardo Reilly. El presidente de la Asociación Rural del Uruguay (ARU) dijo en Valor Agregado en Carve que Uruguay fue un gran culpable de todo el deterioro en el que está inmerso este bloque económico.
“No nos podemos olvidar de cómo empezó todo este lío”, expresó. “Uruguay fue uno de los primeros en que impulsó la suspensión de Paraguay y el ingreso de Venezuela por la ventana; el problema lo compramos nosotros y Uruguay es culpable de que el Mercosur esté en una crisis fenomenal”, agregó el gremialista rural.
Todos los cambios que han surgido en las últimas horas en Brasil “están previstos en la constitución, me cuesta mucho entender por qué se habla de golpe de estado con algunos y por que con otros no lo es”. Reilly pidió “hacer una lectura coherente” de lo que está pasando en la región, porque “si no seguimos en el mundo de la incoherencia donde para los amigos las cosas están bien y con los otros está todo mal”.
Remarcó que “es difícil progresar y pensar en un Mercosur hacia adelante, con una integración regional y mundial coherente”. El presidente de la ARU aseveró que “si no empezamos nosotros a hacer planteos coherentes en lo interno vamos a seguir enmarcados en el contexto en cual estamos”.
Exhortó que este cambio en la región abra una puerta hacia la coherencia, porque no se puede mantener un bloque cuando existen situaciones críticas y descontentos sociales importantes en los países que lo integran. “Obviamente que esto está atado a la corrupción”, declaró Reilly, “cuando vemos a los vecinos el momento que están viviendo se debe también a un gran periodo de corrupción, con saqueos brutales de dinero que corresponden al país y al pueblo”.
Aseguró que el descontento social “es lo peor que le puede pasar a un país; y eso no se desarrolla por un mal manejo administrativo”. Por tanto, aconsejó que “ahora cuando se hace un proceso constitucional debemos ser muy cautos cuando gritamos y decimos que es un golpe de estado, porque eso significa otra cosa y forma parte de una época oscura de varios países de la región”.
Escuche a Ricardo Reilly: