Publicidad

Para Uruguay concretar un Tratado de Libre Comercio con China “sería un antes y después”

Entrevista a Gonzalo Oleggini, consultor en comercio internacional y logística

Gonzalo Oleggini
Cristian Alamón

El pasado 1º de marzo, empezó a transcurrir el último año de gobierno para esta administración encabezada por Luis Lacalle Pou, en la cual en un principio había cifradas expectativas con respecto al trabajo que se pudiera desarrollar a nivel de la inserción internacional, esto en el marco de una situación donde en los últimos 20 años solamente se ha logrado Tratados de Libre Comercio con Egipto e Israel.

El consultor en comercio internacional y logística, Gonzalo Oleggini, dijo a Rurales El País que esta administración “trató de acelerar los procesos”, y si bien no se han concretado TLC, “hay avances puntuales en habilitaciones y certificaciones”.

“Cuando analizamos estos cuatro años tampoco vemos una señal de profundización, se han iniciado muchísimas negociaciones”, indicó el especialista, que en este sentido destacó a: Canadá, Corea del Sur, la Asociación Europea de Libre Comercio, China, Vietnam, Indonesia y Turquía.

“Cuando uno hace un balance, ha estado más por las habilitaciones puntuales y no en los instrumentos más directos como los TLC”, afirmó.

Sobre las negociaciones entre la Unión Europea y el Mercosur, Oleggini se definió a sí mismo como un “ferviente hincha” de las mismas, pero actualmente cree que “no tienen salida a esta altura, todos pensamos en esa última puerta que fue a fin de año, en la cual se estuvo cerca de cerrar, pero creo que hoy no hay ninguna puerta posible”.

Además, en junio se celebrarán las elecciones en el Parlamento Europeo, y allí “seguramente gire hacia la derecha, la cual tiene un discurso más proagrícola de defensa de los productores, entonces el discurso se va a nacionalizar, y difícilmente se logren los votos”.

Ante esta postura de la Unión Europea de proteger a su producción propia, que nuestro país redireccione las negociaciones hacia mercados que no sean autosuficientes alimentariamente “es un tema clave, hay que ir a buscar otros bloques”, con los cuales nuestro país pueda trabajar de forma complementaria en exportaciones e importaciones.

Desde el inicio de esta administración, avanzar en conseguir un TLC con China, ha sido uno de los objetivos de este gobierno en materia de inserción, incluso, en el año 2022 se terminó un estudio de prefactibilidad del mismo, pero lograr el paso final “va a depender de la administración de Argentina, creo que el camino es tratar de convencer a Argentina de que Uruguay necesita ese tratado, y el Mercosur no lo va a hacer, porque hay muchas limitantes”, sostuvo el experto.

Oleggini agregó que las limitantes son las relaciones existentes entre Paraguay y Taiwán “eso hace inviable un tratado Mercosur – China”, y la otra limitación es que la industria brasileña no tiene la capacidad para competir con la china.

“Ahí lo que te queda es convencer a Argentina y también a Brasil, pero Uruguay tiene que insistir, porque un tratado bilateral con China sería un antes y un después, eso no me cabe la menor duda, principalmente en igualar las condiciones de ingreso con Nueva Zelanda y Australia.”, afirmó el consultor.

En esta línea agregó que un factor que favorece a nuestro país, “políticamente la relación con China es mejor que la que tienen Nueva Zelanda y Australia. Australia está enfrentado políticamente a China por el 5G hace muchísimo tiempo, y nuestra posición intermedia nos genera una ventaja, pero necesitamos un tratado para que nuestros productos dejen de pagar esos US$ 260 millones como pasó en el 2022”.

Logística. El también experto en temas de logística, sostuvo que lo que sucede en el mar Rojo “es un tema muy complejo y grave, porque es una de las rutas principales, tiene entre el 25 y el 30% del comercio global, el que va entre Asia y Europa”.

Esta situación de conflicto genera que las compañías marítimas esquiven esa zona, y eso “que parece algo tan simple son 15 días más de viaje, son 15 días más de costos de un barco, y eso lleva a que los fletes entre Europa y China hayan crecido en algunos casos hasta un 100%”.

Las empresas navieras redistribuyen los precios a nivel global, “y nosotros también terminamos perjudicados”. “Ya se ha visto un impacto en los precios en la región”, sostuvo Oleggini.

Otro aspecto logístico que está impactando en el mundo naviero, es la sequía en Panamá, lo cual tiene una base estructural, “eso es algo más grave, porque es un problema de sequía, los embalses de los ríos que alimentan al canal, tienen cada vez menos agua, se generan menos cruces y hay más lista de espera, entonces los tiempo de espera pasan de ser uno o dos días a una semana”, “cuando hablamos de estos mega portacontenedores, hablamos de buques que tiene costos de a veces tienen costo de funcionamiento entre US$ 100.000 y US$ 300.000 diarios, y multiplicados no es lo mismo dos días que una semana”.

“En todo eso el canal ha asumido los costos de sus tarifas, y ahí sí jugamos nosotros porque tenemos línea que pasan el canal y nos impactan de frente en el tema de las cotizaciones, o sea que la complejidad del comercio y la tarifas marítimas, vamos a tener que convivir un tiempo más”, cerró Oleggini.

Firmeza, dinamismo, demanda y nuevos socios en la subasta

Publicidad

Publicidad