Con una alta participación del ganado proveniente del corral, se alargaron las entradas a planta y hubo un leve ajuste en el precio del novillo, lo que no sucedía desde noviembre de 2021.
“La plena faena de cuota 481 habla a las claras del desacelere por parte de la industria en puja y compra de novillos. Hay plantas de porte medio abocadas a las faenas de corral. Es lógico, porque le saca mucha presión de compra de esas categorías y, por eso, las entradas son desparejas”, comentó a El País, Joaquín Falcón, directivo de la Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG).
Hay plantas que están con ingresos para una semana y otras hasta 15 días, sobre todo, en novillos. El novillo cotizó US$ 5,50 por kilo carcasa (un centavo menos). “Hay que aclarar que desde noviembre de 2021 el novillo no tenía flecha hacia abajo, sino que venía con subas consecutivas”, indicó.
Por su parte, la vaca sigue “altamente demandada”. En este caso no tuvo bajas y el promedio quedó en US$ 5,24 por kilo carcasa, igual que una semana atrás. La vaquillona fue la única categoría que aumentó, a US$ 5,35 (dos centavos más).
Estamos en un mercado que está en un momento de inflexión, en donde la industria está pasando precios por debajo de las semanas anteriores.
En tanto, Falcón aclaró que la industria está cómoda con su actividad y “saca el pie del acelerador” en la compra de novillos. “Por supuesto que no todos los árboles llegan al cielo y este afloje estaba previsto para estás épocas y con todos los movimientos que ha tenido el mercado internacional”, indicó.
En ese sentido, afirmó que este ajuste “es sano” para el negocio; para que se estabilicen todos los actores y hayan valores razonables para todas las partes, para que la industria tenga su margen y el invernador también. “Me atrevo a decir que este parate era previsible. Es el momento en que lo puede hacer porque está más cómoda en sus compras”, señaló.
Reposición. Sobre el mercado de la reposición, el directivo de la ACG aseguró que está con muy buena oferta acorde a la época, una demanda selectiva y cautelosa.
“La oferta es el reflejo de lo que sucede en el día a día. En plena zafra de terneros, hay mucho ajuste por la entrada del invierno que recién está semana se va a ver reflejado el factor clima”, comentó.
A su vez, opinó que la demanda es selectiva y que mucha gente realiza sus compras, a pesar de que los ganados no están con el trabajo previo (sin castrar y sin destetar, por ejemplo) y esos son lo que más cuesta colocar.
“Hay mucha cautela por parte del comprador. Las categorías de negocios cortos están más demandadas, ágiles y fluidas y es indiferente la zona porque los ganados se van colocado en todos lados”, dijo.
Ovinos. Finalmente, consultado sobre el mercado ovino, Falcón comentó que se encuentra “con cierta disparidad entre plantas”.
“Hay industrias que están más cómodas y decidieron levantar las compras. El mercado está con una oferta disminuida y una demanda dispar en precios, entradas y categorías”, concluyó.