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La producción de arroz en Tacuarembó se redujo en un 60%, aseguró arrocero

Marcos Ríos, productor de Tacuarembó, contó que en el departamento se redujo en un 60% el área producida de las 20 mil hectáreas que se llegaron a sembrar.

A worker drives a tractor during harvest time in a rice field in the
A worker drives a tractor during harvest time in a rice field in the surroundings of Jose Pedro Varela, 260 km east from Montevideo, on April 25, 2008. Uruguay, which sold outside the country about 1,200,000 tons of rice in 2007, is Latin America's major exporter of the white grain and among the world's top 10. As the impact of soaring prices have triggered unrest in dozens of countries, the International Research Institute based in Philippines, warned on April 11, 2008, that rice prices were likely to keep rising for some time as production fails to keep up with soaring demand. AFP PHOTO / Daniel CASELLI URUGUAY-COMMODITIES-RICE
[dc/mm; dc/mm]; dc/mm/AFP

Tractor en chacra de arroz.

El menor volumen de arroz en la zona y las dificultades para colocar la producción en los mercados, ha provocado que algunos molinos tomen medidas de bajar su producción y enviar a trabajadores a seguro de paro transitorio, es el caso de los molinos de Saman en Tacuarembó y Vergara.

Marcos Ríos, productor arrocero en Tacuarembó por más de 30 años, contó que en el departamento se llegaron a plantar 20 mil hectáreas de arroz, mientras en la actualidad se produce un 60% menos. Eso provocó que varios de los molinos instalados en Tacuarembó cierren y solamente quede el de la empresa Saman.

Dijo que a medida que cerraban los molinos, los productores se iban transfiriendo a otros, pero eso “no fue suficiente” para que las empresas cuenten con un volumen de arroz adecuado. Asimismo y siendo otro problema, los molinos “están con stock de la zafra pasado”, y las empresas “tienen que elaborar en base a la demanda de los países”, pero en este momento “las compras de Irán, Irak y Perú están trancadas”, señaló.

Ríos explicó que algunas industrias tienen arroz elaborado que ocupan lugar de almacenamiento, cuando siempre fue normal que se embarque y se siga procesando lo nuevo. “Es una situación poco común que terminando la cosecha de arroz los molinos tengan poca capacidad de almacenamiento y poco arroz vendido”, contó.

Y agregó: “No es lógico elaborar algo que no está vendido y resulta claro que las industrias tomen esta decisión, como lo de Saman. El escenario no es fácil, es el último molino que nos queda en el departamento y a los productores también nos limita la opción de venta”. El productor de Tacuarembó también dijo que en el departamento hay molinos que están “totalmente abandonados” y algunos de éstos “sin la posibilidad de recuperación”.

Escuche a Marcos Ríos:

Guillermo Crampet

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