Desde la Feria del Importador en China, el trader de carnes Fausto Brighenti analizó la coyuntura que atraviesa el mercado asiático, clave para Uruguay, Argentina y Brasil. “Estamos en un momento raro”, afirmó, debido a la inminente resolución de la salvaguarda que podría implicar aranceles, cupos o precios de referencia. “Esa incertidumbre genera un freno en las decisiones de compra y acumulación de stock tanto en plantas como en depósitos dentro de China”, explicó en Valor Agregado de radio Carve.
La pausa en la operativa se siente con fuerza en todo el Mercosur. “Falta todo noviembre y eso es mucho tiempo para un negocio que depende del flujo constante”, señaló Brighenti. Sin embargo, destacó que, pese a esta coyuntura, China sigue batiendo récords de importación. “Este año superará los 3,2 millones de toneladas y seguirá creciendo. Cada vez hay más chinos consumiendo carne y de mejor calidad”, indicó.
Según el trader, la demanda china aún tiene un largo recorrido: “Llegarán a 10 kilos por habitante al año en poco tiempo, cuando nosotros en el Mercosur consumimos más de 40. El gap es enorme”. En ese sentido, proyectó que el país asiático podría importar hasta 5 millones de toneladas en los próximos cinco años.
Por otro lado, Brighenti destacó el nuevo escenario que se abre para Argentina tras el anuncio del presidente Javier Milei de ampliar la cuota de exportación a Estados Unidos a 80 000 toneladas con beneficio arancelario. “La primera oportunidad es diversificar destinos. Ese volumen va principalmente a carne industrial para hamburguesas, que hoy enviamos a China, pero con mejores condiciones hacia Estados Unidos”, señaló.
A su entender, la apertura estadounidense no afectará a su propio mercado: “Son 60 000 toneladas en un consumo de más de 1,6 millones; es la nada misma dividido en dos. Hará ruido político, pero no moverá la aguja”.
Brighenti concluyó que el desafío para la región es aumentar la producción de novillos pesados y aprovechar las señales de precios récord. “Tenemos mercados abiertos, demanda sostenida y precios altos; ahora falta el producto. Hay que producir más, con más peso y más eficiencia”, resumió.