"El Angus no atraca nunca". La afirmación de María Mattos, al promediar el remate anual de Bayucuá, también sirve para definir lo que fue la 31ª. Edición de este clásico de las zafras de toros. Es que, no hubo atraques, ni trancazos, sino todo lo contrario, suma agilidad y fluidez por cada uno de los lotes que pasaron bajo los martillos de Gerardo Zambrano y Martín San Román, quienes, secundados por sus equipos lograron dispersar la abultada oferta en menos de tres horas.
Como es habitual en el remate anual de la familia Mattos, se dio cita un importante contingente de compradores procedentes de distintas zonas del país, pujando desde el principio, tanto por hembras, como por los toros.
Y comenzó por lo alto. Los primeros reproductores subastados, fueron dos planteleras, vendidas el 50% de cada una: “Amapola” (Duff Red Blood en madre Rubeta Quebrantador), se remató en US$ 10.560 el 50%, adquirida por cabaña “San Luis”. Y también el 50% de “Rosaura” (Referente en madre Charlo), fue vendido en US$ 4.560, adquirida por Cánepa Ltda. Los 14 vientres de pedigree, hicieron un valor medio de US$ 4.791. Además, se vendieron 76 vientres PC y SA, a un valor medio de US$ 1.153.
Todo un remate por sí mismo. Pero faltaba el plato fuerte: los toros.
“Si serán garantidos estos toros, que son los que utilizamos en el rodeo y de ellos son las preñeces de los vientres que acabamos de vender”, aseguró María Mattos, como si hiciera falta más marketing que el que otorgan más de un siglo de selección en Angus.
Y no le defraudaron.
Primero se vendieron los 4 planteleros a un valor medio de US$ 9.000. El mayor destaque fue para “Constancio” (Napoleón en madre Conversation), comercializado en US$ 13.200, adquirido por los centros de genética Reproducción del Norte y Gensur. Luego los 6 toros recomendados, de 2,5 y 2 años, hicieron promedio en 6.080. Y los 30 toros PI de campo de 3 años, un valor medio de US$ 4.436. Todo esto se resume en que los 40 toros PI se comercializaron a un promedio de US$ 5.139.
También se vendieron 18 toros PC de 3 años a un valor medio de US$ 3.940 y finalmente los 14 toros SA de 3 años a US$ 3.175.
El resumen general, fue que los 71 toros ofertados y vendidos por Bayucuá, hicieron un promedio de US$ 4.475.
Un gran remate, que no hace más que ratificar la vigencia de esta centenaria cabaña en el Angus uruguayo. Una raza que, como dijo María Mattos, “no atraca nunca”… Y en los remates de Bayucuá menos…