Esta semana, tras haber detenido sus actividades en julio de 2023, el frigorífico Rosario reanudó su faena. La planta pertenece actualmente en un 100% a una empresa con casa matriz en Hong Kong, vinculada al negocio cárnico y con una importante cartera de clientes en China, según explicó Gonzalo Calviño, representante de la firma en Uruguay.
En diálogo con Valor Agregado de radio Carve, Calviño señaló que el reinicio comenzó por la planta de Rosario “porque desde el punto de vista administrativo era más sencillo hacerlo allí. Por eso, hace un mes y medio firmamos los convenios correspondientes y realizamos jornadas de mantenimiento”.
Este miércoles se llevó a cabo la primera faena de prueba, y se prevé que durante el mes se realicen al menos dos más, incrementando progresivamente el volumen de ganado procesado.
Respecto a los mercados, Calviño subrayó que “como para cualquier frigorífico, contar con la habilitación de China es fundamental”. Explicó que, al cesar actividades en 2023, se informó la situación al Ministerio de Ganadería y, de forma preventiva, las autoridades chinas retiraron la planta del listado de exportadores. “No hubo ningún tipo de observación desde China”, aclaró.
El objetivo ahora es demostrar la operatividad de la planta y notificar a la autoridad aduanera china para obtener nuevamente la habilitación, trámite que requerirá cierto tiempo. Mientras tanto, la empresa realizará faenas de menor escala con destino al abasto.
La planta de Rosario cuenta con capacidad para faenar unos 1.000 vacunos por semana. En paralelo, la otra planta del grupo, Lorsinal, avanza en el mismo proceso: “El plan es idéntico, pero allí estamos un poco más retrasados; actualmente trabajamos en la firma de convenios con los organismos públicos”, precisó Calviño.
Finalmente, destacó que el objetivo de la casa matriz es que ambas plantas estén plenamente operativas hacia fin de año. Sobre la operativa de compra, explicó que el ganado utilizado en la faena de prueba ya fue abonado: “Eso demuestra nuestra capacidad administrativa y de pago, que irá creciendo conforme aumente la actividad. Si bien no es intención trabajar al contado de forma permanente, en esta etapa inicial está justificado”.