Publicidad

Esperan llegar a una buena señalada

Hay un alto porcentaje de corderos mellizos.

Ovinos en Uruguay. Foto: archivo El País.

Ovinos en Uruguay. Foto: archivo El País.

Pablo Antúnez.

La parición ovina está prácticamente terminada y las majadas, al igual que los corderos nacidos, están mostrando un muy buen estado corporal.

Para la oveja las lluvias vinieron bien, porque hicieron rebrotar los campos y si bien no hay tanta cantidad de pasto todavía, para esta especie es suficiente y le sigue asegurando el buen estado corporal; a las madres les asegura una buena producción de leche y eso hará que puedan criar bien los corderos.

“Se ven majadas con muchos cordero al pie, con buena cantidad de leche y buen estado corporal, acompañadas también de una sanidad correcta”, aseguró a El País el doctor Jorge Bonino Morlán, asesor del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL).

Las esquilas pre parto se habían atrasado por las lluvias que afectaron bastante a los departamentos del norte del país, donde está la mayor cantidad de ovinos. El exceso de agua que se registró en abril complicó la evolución corporal de la oveja, pero a medida que se recuperó la temperatura en julio y agosto, los vientres lograron recuperar estado.

Bonino aseguró que “se ven muchos corderos mellizos” y ese porcentaje alto de ovejas con dos corderos “sustituye algún cordero que haya muerto o ovejas que hayan perdido el cordero durante la gestación”.

Tanto los productores como los técnicos esperan que se llegue a una buena señalada (momento del descole e identificación de los corderos nacidos).

“El porcentaje de recría es lo que más interesa. La recría durante todo el año que viene deberá ser buena y se tendrá que aplicar un buen paquete sanitario para poder llegar con el macho, para invernarlo a término y con las borregas —que serán la futura reposición— con buenos pesos, para que sigan manteniendo buena fertilidad y fecundidad”, explicó Bonino.

En cuanto a la sanidad, el veterinario recordó a los productores que “cuando hay calor y humedad, se debe controlar los posibles problemas podales, lo mismo que las bicheras”, por más que hasta ahora no hayan surgido mayores inconvenientes. A nivel de parásitos gastrointestinales, Bonino recordó que hay que “tener cuidado (principalmente con las lombrices como el moncus). Muchos están haciendo las señaladas o van a hacer las señaladas y ahí se harán los análisis coprológicos para ver si se justifican o no la dosificación de los adultos”. A su vez, en febrero habrá que hacer la primer vacuna de clostridiosis y la de estigma contagioso, dos vacunas fundamentales para la especie.

Lograr una buena sobrevivencia de los corderos posibilitará poder aprovechar las oportunidades comerciales.

Guillermo Crampet

Publicidad

Publicidad