El Ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca hizo un balance positivo de la Misión Oficial encabezada por el presidente Lacalle Pou y cuatro Ministros a China. Destacó que la Asociación Estratégica Integral “lo coloca a Uruguay en la mejor situación desde que se establecieron relaciones diplomáticas”. Paralelamente, Fernando Mattos Costa ponderó el hecho que los presidentes Lacalle Pou y Xi Jinping mencionaran la voluntad de “acelerar los pasos para lograr un tratado de libre comercio”. Además destacó gestiones para carnes, granos y lanas.
-¿Cuál es el balance de la misión a China? ¿Se logró lo que lo que esperaba?
-Sí, fue decisiva esta visita de Estado por invitación del presidente Xi Jinping. Habíamos conversado con el presidente Lacalle Pou la importancia que esta instancia se realizara y a esos efectos venimos trabajando desde el año pasado con varias visitas oficiales previas, lo que generó una secuencia de reuniones en nuestro principal mercado de destino, tratando de ampliar y mejorar todos los aspectos de protocolos de acceso, de mercados, también convenios o memorandos de entendimiento con distintas instituciones. La visita del presidente termina sellando cantidad de acuerdos y otros que quedaron elaborados y casi en la puerta de su concreción.
-¿La Asociación Estratégica Integral, es la antesala para llegar a un TLC?
-Este estatus de relacionamiento, lo coloca a Uruguay en la mejor situación desde que se establecieron relaciones diplomáticas hace 35 años. Este es el nivel máximo de relacionamiento entre China y otros países. Es mucho más amplio que un TLC. Lo que pasa es que al TLC siempre se lo ve como una posibilidad concreta de acceder al mercado con una reducción a la arancelaria, a la vista que, en el año 22, por ejemplo, le pagamos a la tesorería china para acceder al mercado US$ 254 millones.
Aranceles: la voluntad de ambos es “acelerar”
-¿Esta Asociación no contempla una reducción de aranceles?
-No, los aspectos arancelarios tienen que pasar dentro de lo que son las normas de la Organización Mundial de Comercio. Y por lo tanto la única manera de que se pueda hacer en forma bilateral, sin despertar el principio de Nación más favorecida, sería a través de un tratado de libre comercio. Esto no estuvo en la pauta de discusión, pero claramente tampoco estuvo la negativa de China en avanzar. Lo ha demostrado claramente el presidente Xi Jinping que fue muy claro en la intención de avanzar. Y se usó la palabra de acelerar, por parte del propio presidente chino. Hay un buen ambiente, estamos en mejor posición, pero no se quiere generar, en función de nuestra pertenencia del Mercosur, alguna contrariedad que seguramente tendrá que ser discutida y barajada en las próximas semanas.
-Los acuerdos agropecuarios ¿cuándo entran en vigencia?
-En realidad, la modificación del protocolo de carne bovina y ovina entran en vigencia inmediatamente a la vez que se firmen los acuerdos. El tema es que hay un aspecto instrumental. Cuando hablamos del periodo de espera de los ganados, tantos bovinos, como ovinos, en el periodo de cuarentena o de permanencia en los predios previo a la faena, lo debemos ajustar en los próximos días dentro de los controles del Sistema Nacional de Información Ganadera (SNIG). Por lo tanto, hay ajustes informáticos para que, cuando el periodo de permanencia sea menor, salten las alertas y que se deba evitar ese tipo de movimiento para faena. Es un tema de algunos ajustes de los programas informáticos que ya están trabajando los equipos del Ministerio y no va a haber mayor dificultad.
-¿El protocolo incluye alguna exigencia extra a los productores?
-No, no. En absoluto, porque en realidad el argumento uruguayo era que había una disparidad en la interpretación del Código de animales terrestres de la Organización Mundial de Salud Animal, donde esa regla que rigió desde el 2018 hasta la fecha, se refería a cuando un país importa animales de otro que es de estatus libre de Aftosa con vacunación. En este caso, no implica que sean animales importados en pie. Uruguay no hace esa práctica. Los animales que son destinados a China son animales obligatoriamente nacidos, criados y faenados en Uruguay, y por lo tanto esto es una medida que, en base a la argumentación técnica esgrimida por MGAP, se logró esta reducción que es muy importante para conferirle agilidad a los sistemas de finalización ganaderos, sea a corral o sea a campo. Tendremos muchas más posibilidades de negocios y agilidad en la terminación de estos ganados.
-El INAC situó en una diferencia de unos US$ 40 millones la habilitación de los mondongos y los librillos…
-Es así, eso fue una gran conquista que se logró a través de la presentación de trabajos técnicos. Venimos trabajando hace varios meses en la documentación sanitaria. Es un producto que marca una diferencia de precio notoria en relación a las opciones que tenemos hoy disponibles y evidentemente es de los aspectos más significativos que va a repercutir rápidamente en la pauta exportadora. También en esto, deberemos registrar las plantas exportadoras de acuerdo con el producto nuevo que se incorpora al anexo de los productos listados en el protocolo bovino.
-¿Cómo es eso?
-Quiere decir que no es que esté automáticamente autorizado, ahora las empresas tendrán que inscribirse de acuerdo con la reglamentación en el sistema de altas que determina el GAC de China para las empresas que estén habilitadas. Ellas tendrán que notificarse de los términos del protocolo que tiene una serie de condiciones en cuanto al sistema de elaboración, cocción, tiempo de permanencia en el sistema de cocido y también una serie de parámetros de microbiología que deberán cumplirse, pero que evidentemente va a tener un gran impacto en la valorización de un producto que hoy estaba con destinos que eran alternativos y que no eran los que mejor se remuneraban en el mercado internacional.
-Caballos deportivos, fue otro de los puntos del protocolo.
-Habíamos estado con una delegación de criadores y propietarios de caballos deportivos en la misión que tuvimos en mayo. Allí estuvimos con la Asociación China, que es la gran organización que apoyó en todo sentido el procesamiento de este protocolo. También fue muy discutido desde el punto de vista de las reglas sanitarias y de las condiciones de exportación, y va a ser un rubro que se abre para un país que tiene una alta demanda de caballos deportivos. Y de las posibilidades que se abren también para ingresar algunos mercados de competencia que existen aquí en China, que son incipientes, pero que todavía, tanto en Hong Kong como en Macao, existen posibilidades también de carreras con apuestas. Las apuestas en la China continental están prohibidas, no hay autorización, pero hay comentarios de que se iría rumbo a una apertura. Evidentemente el hecho de tener caballos deportivos habilitados le genera toda una oportunidad al mundo ecuestre uruguayo para acceder a un gran mercado que además tiene, como en varias partes del mundo, una enorme pasión por los equinos y fundamentalmente aplicado tanto al rubro paseo como al deporte.
-Se agregaron los limones a lo que ya estaba habilitado anteriormente, como las naranjas, mandarinas y pomelos.
-Exactamente, esto cierra con lo que son los productos tradicionales de la horticultura uruguaya. Los limones son un producto que demanda China de forma importante, si bien es un gran productor y en algún caso exportador de limones. Pero tiene una situación también deficitaria en contra estación, así que termina siendo importador de mucho volumen, de algunos países como Sudáfrica y otros mercados proveedores. Así que, también se abre una posibilidad importante a una citricultura que tiene en el Uruguay un desarrollo creciente y fundamentalmente en el rubro de los limones, que no es el más significativo, pero esto complementa una ecuación de posibilidades de exportación.
-¿Los recursos acuáticos vivos qué implicancia concreta tienen?
-Teníamos dos protocolos que veníamos trabajándolos hace bastante tiempo, con negociaciones bastante intensas y duras con el GAC. Uno era de los acuáticos vivos, que seguramente es importante para algunas especies, pero para otras debíamos referirnos al acuático silvestre, que es la pesca normal. Recordemos que la industria exportadora pesquera de Uruguay está exportando a China, pero el hecho de contar con un protocolo da muchas más garantías en cuanto a que exista un documento que determina las condiciones por las cuales se debe hacer. Hoy la industria uruguaya y extranjera instalada en Uruguay, exporta desde distintas instalaciones, pero sin las garantías que proporciona un protocolo. Así que, estamos contentos de este paso, pero quedamos muy al borde y ya prácticamente acordados con lo que es el acuático silvestre, independientemente del punto de vista del volumen de ventas, es mucho más significativo. Así que esperemos que en las próximas semanas tengamos buenas noticias en este sentido.
-Estuvo reunido con Sundiro Holding, por la deuda de los frigoríficos Lorsinal y Rosario, estimada en unos 7 millones de dólares, ¿cómo fue ese encuentro?
-Venimos haciendo reuniones hace varias semanas, en varios ámbitos, desde antes de salir de Montevideo, con algunas acciones a nivel diplomático también, previo a la visita del presidente. Este tema no estuvo en los temas de agenda de gobierno a gobierno, pero sí se habían transmitido a través de la comisión mixta en septiembre. Solicitamos la reunión a la compañía que vino a reunirse con nosotros en Beijing. Estuvo participando el vicepresidente Inac también, y el equipo de la embajada, para hacer el seguimiento correspondiente y la voluntad de Sundiro de hacer frente a sus obligaciones, de proyectar la reanudación de las actividades. Ellos están buscando capitalización de la empresa, pero fundamentalmente la búsqueda de un plan de negocio viable, factible, que no genere solamente un movimiento de cubrir las obligaciones pendientes que tiene con distintos sectores, sino con una mirada de futuro, de continuidad en el negocio. Esto quiere decir que el objetivo fundamental es que el grupo vuelva a la actividad, que los trabajadores vuelvan a trabajar, que cumplan con sus deudas y sus compromisos, y que sigan con un plan de negocio que le dé viabilidad hacia el futuro.
-¿Qué plazos se manejan?
-Nos transmitieron los máximos esfuerzos que vienen realizando inclusive a nivel de algunas gobernaciones que están apoyando esta acción, y algunos clientes chinos de importancia que han tomado la posibilidad de adelantar ventas futuras. Para eso, se está planificando la reanudación de la actividad para el mes de enero, y al mismo tiempo deberemos apoyarlos en el sentido de subir nuevamente la habilitación de acuerdo con las normas que están establecidas en el protocolo con China, y que es un aspecto fundamental para que puedan reanudar las actividades dentro de ese plan de factibilidad que le hemos exigido que tuvieron a mano.
-¿Se habló sobre nuevas exigencias de China para los granos?
-Había un rumor de nuevas reglas y consideraciones. Vamos a tener reunión adicional en China. Pero no hay ninguna exigencia oficial respecto a cambios de los parámetros de calidad por los cuales los productores debieran entregar su cosecha. Que quede claro: para la cosecha que está en curso, y la de otoño, no hay ningún cambio exigido por China, si bien hay algunos mercados que empiezan a aumentar niveles de exigencia en cuanto a humedad y granos dañados, lo que generó preocupación en Uruguay. Pero no hay nada oficial, no estuvo en la conversación que se quiera imponer nuevos parámetros. O sea, tranquilidad absoluta en la próxima zafra. Veremos en el futuro si surgiera algo, ahora no hay nada.
-¿Novedades para el rubro ovino?
-Tuvimos varias reuniones, incluso junto con los empresarios que hicieron parte de la delegación, los representantes de Lanas de Trinidad, que los invitamos a concurrir, a una reunión organizada por Cofco, empresa que se dedica a la importación de alimentos, donde su fuerte son los granos, las carnes, los lácteos, y tiene una subsidiaria, que es Chinatex, que ha sido a lo largo de los tiempos un gran actor en la demanda de las lanas uruguayas. Estuvimos analizando la realidad del mercado, las dificultades que ha encontrado la colocación con una demanda muy débil para las lanas medias y las lanas gruesas. Y manejando algunas posibilidades con la muy buena voluntad de esta gran empresa que tiene muchos contactos a nivel del Ministerio de Comercio, del gobierno de China.
-¿Es optimista?
-Les transmitimos que, más allá de los cambios de hábitos de la demanda que exigen lanas más finas, el productor uruguayo de lanas medias viene corriendo de atrás, viene afinando y está haciendo el esfuerzo. Pero, hay finuras que ya no tienen demanda, prácticamente no hay valor de mercado. Hicimos un pedido a esta compañía y haremos algunas gestiones además con el gobierno de China a efectos de solicitar ese esfuerzo, reiterando nuestro pedido realizado en nuestra gira de mayo, a efectos de tratar de canalizar estos enormes stocks con que cuenta el Uruguay y que ha tenido en vilo al sistema productivo de este tipo de lanas. La idea es generar alguna reunión en Montevideo para contarle a los actores, tanto industriales como productores y al SUL, cuál es la realidad que nos encontramos. Queremos hacer el máximo esfuerzo para tratar de resolver este problema del sobre stock de una mercadería que no está teniendo demanda.