Para el próximo año, proyectamos una reducción en la oferta de animales, marcando el primer retroceso anual después de tres años consecutivos de expansión”, dijo la consultora Agrifatto acerca de la expectativa de evolución del mercado ganadero en Brasil el año próximo. Este escenario es el resultado de la alta participación de hembras en la faena de los últimos dos años, lo que derivará en una menor disponibilidad de animales terminados. “Estimamos que la faena totalice 37,76 millones de vacunos, reflejando una caída del 3,5% en relación con 2024”, dice Agrifatto. Como consecuencia, la producción de carne bovina debería disminuir 2,6%, alcanzando 9,97 millones de toneladas.
A pesar de esta reducción en la producción, las exportaciones se mantendrían fluidas, respaldadas por una firme demanda internacional desde el sudeste asiático y también desde Estados Unidos. La mejora de la competitividad de los exportadores por la debilidad del tipo de cambio permitiría un crecimiento de los volúmenes colocados en el mercado internacional de 3,2% a 2,62 millones de toneladas, de acuerdo con la proyección de Agrifatto, por lo que todo el peso de la baja de la producción recaería sobre un debilitado mercado interno.
Ante una oferta reducida de carne bovina y una demanda externa dinámica, la visión central de la consultora para 2025 es una revalorización real (por encima de la inflación) para el ganado gordo. Se espera que los precios sigan una tendencia al alza, oscilando entre R$ 290/@ y R$ 330/@ en el primer semestre en el estado de São Paulo. Dependiendo de las condiciones climáticas, podría darse una recuperación más marcada a partir del tercer trimestre de 2025, con la expectativa de que el precio del ganado gordo alcance los R$ 400,00/@ hacia finales de año. Esto implicaría una valorización de 27% en el año. La evolución del tipo de cambio determinará el valor expresado en dólares, luego de un 2024 que cierra con una caída del real de 29% en su paridad con el dólar estadounidense.