El enemigo natural de la garrapata es el frío y las temperaturas de principio de mes, que estuvieron por debajo de lo normal para esta altura del año e incluso las heladas tardías, atenuaron la presencia del parásito, que sigue estando en el campo.
Al menos en el norte del país, “parece un año bastante tranquilo”, aunque “hay infestación”, destacó el Dr. Rafael Carriquiry, técnico del Instituto Plan Agropecuario (IPA).
Según la visión de este experto “hay que tener claro que que la garrapata está en el campo”: que no se esté subiendo a los animales no significa que haya desaparecido el problema. “No lo estamos notando pero sigue estando ahí”, dijo.
Recomendó a los productores ganaderos revisar el plan de control sanitario del establecimiento, usando con cuidado los distintos principios activos para combatir esta parasitosis, a razón de un principio activo por generación del insecto, para evitar la resistencia a los zooterápicos.
No hay productos nuevos para los tratamientos y eso obliga a utilizar cada vez mejor las herramientas que están a disposición del productor para poder combatir la garrapata.
Revisión. Carriquiry también insistió en que “hay que revisar los animales con frecuencia” y, en ese sentido, advirtió que no es sólo encerrarlos y mirarlos. “Hay que tocarlos y revisarlos con las manos. Lo que notamos son la aparición de pocas garrapatas, que son juveniles (son chiquitas) y con las manos se encuentran”. Si hay garrapatas sobre el ganado hay que tratarla “porque más adelante se transforman en muchas más. Es un momento importante”
El veterinario del IPA recordó a los productores que hay que actuar ahora contra la garrapata para poder vender los terneros en el otoño sin problemas. “Si nos distraemos ahora el otoño nos pasa la factura, se multiplica la infestación y cuando vamos a vender está difícil de controlar porque la tropa está toda infestada”, recordó.
Hemovacuna. Respecto al uso de la hemovacuna que controla tristeza y anaplasmosis, las dos enfermedades asociadas a la garrapata, el especialista admitió que es notorio que hay más productores usando esta herramienta. “Mi percepción es que su uso sigue creciendo y se aplica en adultos, lo que demuestra que la gente le está perdiendo el miedo”.
Si bien la recomendación es aplicar la hemovacuna en terneros menores de nueve meses, también se puede usar en ganado adulto. “Tenemos la experiencia de haber exportado durante muchos años ganado Holando para Brasil y tenemos la experiencia de haber vacunado las vaquillonas de dos y tres años”, recordó Carriquiry.
La recomendación técnica es que las dosis sean aplicadas por un veterinario, especialmente en animales adultos. “Hay un protocolo donde se puede utilizar un producto químico que corta la reacción a los 10 días de la vacunación, pero lo principal es tener un buen control y asesorarse con un veterinario. Es muy efectiva pero tiene muchos detalles a la hora de usarla, es una vacuna delicada”, advirtió Carriquiry.
