La exportación generó 16,4% menos divisas frente igual fecha de 2019.
Ganadería.
Pablo Antúnez
En los primeros cuatro meses de 2020 la faena de bovinos en Uruguay se redujo 27,8% respecto al mismo período del año pasado y si bien fue la tendencia dominante, la caída fue más drástica en abril, cuando se alcanzó el 35%.
Según los datos del Instituto Nacional de Carnes (INAC), el descenso de 27,8% representa 237.000 cabezas bovinas, lo que refleja el impacto de la caída.
Respecto a los precios del ganado, el valor del novillo gordo quedó por debajo de los valores de 2019. No obstante, los promedios acumulados (enero-abril) se ubicaron por encima de los valores correspondientes al primer cuatrimestre de 2019.
La baja en la faena también se reflejó en una menor exportación de carne bovina y subproductos. En ese sentido, INAC destacó que en los primeros cuatro meses del año en curso las exportaciones del sector generaron US$ 579 millones por concepto de todas las carnes, cifra que representa 16,4% menos respecto al mismo período del año anterior.
Los US$ 267 millones provenientes de las exportaciones a China reflejan una baja en el volumen de 29% —siempre respecto a igual fecha del año anterior—, pero aun así, este mercado asiático fue muy importante. El mercado del Nafta (Canadá, México y Estados Unidos) aumentó 7%, ubicándose en segundo lugar con 21% de los ingresos, seguido de la Unión Europea con 17%.
El análisis del INAC destaca que una reestructura de mercados es la tónica cuando se observan los volúmenes de exportación, que se redujeron 25%. Esto significa unas 41 mil toneladas menos (equivalente peso canal) que tuvieron diferente distribución entre los mercados.
China continúa siendo el principal destino de la carne bovina representando el 52% del volumen, pero fue el mercado con mayor reducción (36% menos que 2019). Compensan otros destinos con caídas menores como es el caso de Nafta o Federación Rusa.
A su vez, el ingreso promedio de exportación acumulado al primer cuatrimestre fue US$ 3.962 por tonelada peso canal; un 11,6% por encima del primer cuatrimestre de 2019.
El consumo total de proteínas en el abasto se redujo 5,1%, lo que se explica por una disminución en el consumo de todas las carnes, con excepción de la carne aviar que verificó un incremento del 17,3%.
Los volúmenes de carne bovina provienen mayoritariamente de la faena nacional, no obstante se observa que en los tres primeros meses de 2020, 1 de cada 4 kg es de origen importado, lo que acentúa la tendencia de crecimiento en las importaciones de carne bovina, ya observada en 2019.
Al cierre del cuatrimestre, los precios al público de las carnes bovina, porcina y aviar muestran un crecimiento de 1,8%, 0,6% y 4,9%, con respecto a diciembre 2019, respectivamente.
Este aumento en los precios de la carne resulta inferior a la evolución del IPC en el mismo período, el cual se incrementó un 6,2% con respecto a diciembre 2019. Focalizándose en el último año (Abril 2019=100), el INAC sostiene que el índice de precios de la carne bovina al público de INAC crece 32% en todo el período siguiendo una paridad de exportación pero recogiendo dos fenómenos diferentes: hasta febrero de 2020 la paridad con el mercado doméstico la define la evolución del Índice Medio de Exportación en dólares; fuerte subida hasta diciembre, caída en enero-febrero 2020.