Carlos Gauto, director de “La Tropa Consignataria, aseguró que hoy “los precios están estáticos en Paraguay”. Agregó que “el propietario de tierra no tiene apuro en vender a no ser negocios puntuales por distintas circunstancias”.
Guillermo Crampet,
Corresponsal de Rurales El País en Paraguay
Con un presente que está lejos de su techo, la ganadería paraguaya visualiza un horizonte muy próspero para la cadena agropecuaria con la intensificación de la producción, la apertura y desarrollo de nuevos mercados e inversiones millonarias para la construcción de nuevas plantas frigoríficas.
Con un futuro muy alentador, y con una coyuntura de precios firmes y estables, y exportaciones históricas de carne bovina para el primer semestre del año; el negocio inmobiliario rural en Paraguay transita una etapa de tregua luego del boom de transacciones que se experimentó en la década anterior.
El director de La Tropa Consignataria, Carlos Gauto, explicó a Rurales El País que el mercado de los campos está lento, una de las razones está directamente relacionada al cierre de las fronteras con países vecinos y el cepo cambiario en Argentina. “Hay consultas e intercambios de información por campos con empresarios de los países vecinos, con más interés que el año pasado, pero con un mercado calmo”, reiteró.
También comentó que la dinámica del negocio de los campos es más lenta en copiar las variaciones del mercado de haciendas, que recién se viene recuperando después de los duros golpes sufridos en los últimos dos años pasados. “Recién ahora estamos ingresando a una órbita atractiva de precios para pensar en inversiones”, indicó.
“Actualmente los precios están estáticos”, dijo Gauto y explicó que los tenedores de campo saben que tienen en sus manos un bien preciado y con mucho potencial. “Hoy el propietario de tierra no tiene apuro de venta, a no ser de negocios puntuales que por diferentes circunstancias toman una decisión de comercialización”, dijo.
Si bien las referencias de los campos en Paraguay varían mucho de las zonas y los niveles de desarrollo, el Director de La Tropa Consignataria indicó que en las regiones más marginales del Chaco, campos para desarrollar en Boquerón, o Alto Paraguay, los precios oscilan entre 300 a 700 dólares por hectárea.
Para los campos ganaderos más formados, siempre dependiendo del grado de desarrollo e inversión global, los valores varían entre 700 a 1.500 US$/Há.
En relación al retorno del capital, Carlos Gauto dijo que “hay muchas variables que entran en juego para definir un porcentaje, pero considerando la potencialidad de la agropecuaria paraguaya, haciendo una muy buena ganadería se puede lograr una rentabilidad aproximada del 4 al 20%”.