Dieron documento al presidente con planteos para mejorar competitividad.
Alfredo Lago, presidente de la Asociación de Cultivadores de Arroz.
Pablo Antunez
La Asociación Cultivadores de Arroz (ACA) entregó ayer un documento al presidente Tabaré Vázquez, planteando una serie de medidas que permitan volver a plantar en la próxima zafra y mejoren la competitividad.
Uruguay es el sexto exportador mundial de arroz, generándose cada año más de US$ 200 millones por la venta de alrededor de 1,3 millones de toneladas del cereal. Genera alrededor de 30.000 puestos de trabajo entre directos e indirectos.
El encuentro entre el Ejecutivo y productores arroceros se realizó en la residencia de Suárez y Reyes. El presidente Tabaré Vázquez estuvo acompañado por los ministros Danilo Astori (Economía y Finanzas), Enzo Benech (Ganadería, Agricultura y Pesca) y el subdirector de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Santiago Soto.
Pedidos. Si bien el documento que se le entregó al primer mandatorio no se divulgó, el presidente de la ACA, Alfredo Lago adelantó que se pidió “un esfuerzo del gobierno”.
Contó que se le solicitó al Ejecutivo no subir el precio del gasoil y poder comprar directo al por mayor el combustible, lo que redunda en una baja en el precio. “Es fundamental que nos indexe el precio del gasoil. Apelamos a que se mantenga el precio del gasoil en pesos por litro. Sabemos que la variable de Ancap hoy está en otra cosa pero es parte del esfuerzo que tienen que hacer para generar el negocio”, afirmó Lago.
Como otra medida para mejorar la competitividad y aliviar el bolsillo de los productores, ACA solicitó mantener el 15% a la tarifa de riego y llevar a 20% el descuento para la industria, pero manteniéndolo durante todo el año. “Eso hoy son solo tres meses para la industria por un monto de 15%, queremos 20% por todo el año”, explicó el titular de la gremial arrocera.
Créditos. Hay un capítulo del documento que está relacionado con lo financiero. La ACA quiere que el gobierno deje disponibles los créditos generados en la Dirección General Impositiva y moderar la intervención del Banco Central del Uruguay en el precio del dólar, de acuerdo con la tendencia alcista del mercado cambiario.
“Tenemos un endeudamiento de US$ 1.000 por hectárea, debemos US$ 150 millones a la banca pública, privada, los molinos y proveedores. Estamos planteando que haya alguna reestructura de deuda que lo pueda bonificar a través de un actor financiero público (BROU), que contemple plazo y costo, con una tasa adecuada a la recuperación del sector”, adelantó Lago a El País.
Según explicó, la gremial entiende que a nivel de tasa de cambios mejores, “seguramente hay precios regionales que no están hoy pero que mejorarán. Creemos que entraríamos en un ciclo de mejora del negocio del arroz”, insistió Lago. Por eso pidió: “busquémosle una herramienta financiera que pueda contemplar la necesidad de plazo que tenemos para enfrentar las deudas que no podremos cumplir con los vencimientos que tienen”.
La ACA solicitó al Ejecutivo que genere “un instrumento financiero que pueda adelantar US$ 2 por bolsa de futuras devoluciones de impuestos, que podría generar una liquidez de US$ 40 millones y que sea retornable en la medida que se supere cierto número de precio por bolsa. En los últimos 11 años, en promedio, el precio de la bolsa de arroz de 50 kilos sano, seco y limpio fue US$ 12”, recordó Lago.
El mecanismo deberá contemplar devolver en aquellos años donde el ingreso al productor supere la media de los últimos 10 años (US$ 12,50 por bolsa) y/o con un aumento de la devolución de impuestos a 6%”, según explicó la ACA.
Mercados. También hubo pedidos vinculados con el comercio exterior. Entre ellos se destacan las dificultades que está mostrando Perú, tradicional comprador de arroces uruguayos y gran consumidor del cereal, donde Uruguay paga un arancel muy alto. “Creemos que con algunas gestiones oficiales se puede estar subsanando”, estimó Lago.
El gobierno pidió 10 días para contestar los reclamos del sector arrocero. “Si el gobierno no entendió que estás medidas son necesarias, el sector arrocero se seguirá achicando y las consecuencias sobre el empleo del interior, que ya está muy afectado, se van a profundizar. Si no se le tira un flotador al que se está ahogando se va a hundir del todo”, advirtió el presidente de la ACA.