Con una mirada de futuro, solicitaron “recuperar los valores perdidos" y "no esperar todo de Papá Estado”.
Acto de Un Solo Uruguay en La Macana, Florida. Foto: Un Solo Uruguay.
Una vez más Un Solo Uruguay logró una gran convocatoria. Fue en La Macana, en Florida, donde miles de ciudadanos se acercaron a escuchar a los oradores y manifestar al Gobierno su necesidad de ser escuchados. En un descampado, con el cielo celeste, sol a pleno y a menos de 100 metros de la carpa del Consejo de Ministros, que contaba con la presencia del presidente de la República Tabaré Vázquez.
“Queremos vivir de nuestro trabajo”, resaltó Diego Machín, delegado local del movimiento. Y rápidamente agregó: “Nos preocupa que los ingresos de todos han sido transferidos para mantener a un Estado cada vez más grande e ineficiente y con un gasto público desmedido”. Machín exhortó a todos los presentes a “recuperar los valores perdidos: familia, trabajo, seguridad ciudadana, educación y respeto”. Y también que “niños y jóvenes se ilusionen, tengan espíritu emprendedor y no esperen todo de Papá Estado”.
También con proyecciones de largo plazo, Guillermo Franchi, representante de la Mesa Nacional de Un Solo Uruguay, exigió “respeto a todos los pobladores del Uruguay. Que nos canten la justa, que nos hablen con la verdad, que salgan al interior y aporten soluciones”. Asimismo, aseveró que “nos merecemos otro Uruguay, donde podamos mirar hacia el futuro, invertir pensando en 10 o 15 años. Es hora que maduremos como sociedad”.
Franchi reiteró que desde Un Solo Uruguay “queremos un país para todos los uruguayos y que no nos sigan dividiendo. Porque esto es de todos, para todos los uruguayos. No preguntamos a quién vota, ni religión, ni gremio”. Y finalizó con un pensamiento: “Quizás mañana tengamos que sentarnos frente a nuestros hijos y decirles que fuimos derrotados, pero nunca que viven así porque no nos animamos a luchar”.
Por último y cerrando el acto del movimiento, Juan Brea Saravia, integrante del mismo por el departamento de Treinta y Tres, calificó su discurso como el “discurso de las angustias” y aseguró que la presencia de tantos uruguayos se debe “porque estamos frente a un Gobierno que decimos que es mudo, pero también es sordo, ciego e insensible a las necesidades que tenemos”.
Brea Saravia dijo que los ciudadanos pretenden “una buena gestión para solucionar los problemas” que atraviesan muchas de las familias involucradas al sector productivo. También se refirió al costo del estado, a la educación, seguridad, al endeudamiento y la ideología, pero reiteró en varias oportunidades que “Un Solo Uruguay es absolutamente apartidario y no está para sacar a este Gobierno o poner otro, solo para exigir soluciones a un país productivo. Y además, vino para quedarse”.