Según trascendió, desde ayer se registraron incidentes en la Planta N°7 de Conaprole, donde operarios del sector de mantenimiento habrían rechazado cumplir con tareas que forman parte de sus funciones rutinarias. La medida estaría vinculada a un desacuerdo en el ámbito de revisión de categorías de oficio, según afirmaron fuentes allegadas a la cooperativa.
Las tareas solicitadas, de acuerdo a lo que pudo saberse, han sido parte del trabajo cotidiano durante varios años, por lo que no se consideraría justificada la negativa. Desde la interna se interpreta que la decisión de los trabajadores responde a una estrategia para presionar por mejoras salariales, generando un nuevo foco de conflicto.
Además, fuentes confirmaron que la Asociación de Obreros y Empleados de Conaprole (AOEC) comunicó la aplicación de medidas gremiales a nivel general, lo cual podría agravar los efectos sobre la operativa de la cooperativa en un contexto que ya es considerado de “extrema complejidad” para la industria láctea.
Desde el entorno empresarial se hizo un llamado a la responsabilidad del gremio, destacando la necesidad de preservar el diálogo y evitar medidas que afecten la producción en momentos especialmente sensibles para el sector.