Tras el traspié con el sindicato, el mercado de haciendas gordas volvió a tomar un “movimiento interesante” y, con una faena por encima de las 60 mil cabezas semanales, el mercado “está firme, demandado y dispar en entradas a planta. Los valores, en tanto, son “interesantes” para cualquiera de las categorías. El novillo cotiza de US$ 4,25 a US$ 4,30 por kilo, con mejores referencias para lo destacado. En vaca se manejan US$ 4,10.
Gerardo Zambrano, director de Zambrano & Cía, opinó que la cantidad de ganado depende del precio y del tipo que se faene.
“El ganado escasea sin ninguna duda y el clima es absolutamente dependiente. La única forma de mantener el buen ritmo de faena es con estos precios”, aseguró.
La industria está “más que preparada” en ese aspecto, opinó.
“Si uno analiza este año, el primer semestre fue bueno, pero normal; y en el último semestre las cosas mejoraron sustancialmente. Soy optimista para el 2022, los valores son el mejor incentivo de cualquiera de los productores. Hay muchas cosas que se prestan para aumentar los rodeos. Hoy la gente invierte y eso hará que aumenten los terneros”, explicó.
Además, Zambrano hizo referencia a que “todo apunta” a que la producción de carne crezca, con un complemento u otro, porque hay herramientas que así lo permiten.
“Cuando los precios dan se puede hay que apuntar a mejorar el porcentaje de preñez que viene estabilizado. Hay que mejorar y hay que estimular el precio para eso”, indicó.
Sobre el precio del ganado, opinó que, de darse condiciones “normales”, no tiene dudas de que va a estar por arriba de los US$ 4. “No veo a ningún novillo por debajo de los US$ 4. Por suerte está China, porque Europa es muy complicada…”, señaló.
Finalmente, el empresario opinó que el gobierno le ha dado un espaldarazo muy importante al sector y que los proyectos de inversión, en ese sentido, “son una herramienta muy importante”.
“Hemos estado bien alineados y es una tranquilidad para quienes dependemos de eso. Hay problemas de costos de producción que no son culpa del gobierno, si no una acumulación de costos que han hecho al país caro para producir y vivir. Hay cosas que no son fáciles de dar vuelta. Está todo alineado, pero los buenos precios son clave para estimular el sector. Solucionan un montón de dificultades, pero, a su vez, están prendidos del mercado internacional y su demanda”, concluyó.