Comienza mañana la Asamblea Anual de la OIE en París.
Ganado vacuno junto a un camino buscando alimento por la sequia, escasez de lluvias, ternero mamando, nd 20090109, foto Ines Guimaraens, Archivo El País
Pablo Antúnez.
Desde el próximo domingo 22 y hasta el viernes 27, se celebra en París la 84ª. Sesión General de la Asamblea Mundial de Delegados de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), el organismo que regula la sanidad del comercio de animales vivos y subproductos, cuyas normas son refrendadas por la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Uruguay es uno de los 180 países miembros y en la Asamblea Mundial de Delegados podrá debatir las normas internacionales aplicables para la prevención y control de las enfermedades de origen animal, aspectos vinculados con el bienestar de la especie, así como el comercio de animales y productos a nivel internacional.
Este año, durante la sesión general, se presentarán dos temas técnicos que son: "la economía de la sanidad animal: costos directos e indirectos de los brotes de enfermedades animales" y "el combatir la resistencia antimicrobiana a través del enfoque: una sola salud, acciones y estrategias de la OIE". Este ha sido un concepto que dicho organismo viene impulsando con éxito en los últimos años entre los países miembros, al igual que la evaluación de los servicios veterinarios de cada uno de los países miembros, como forma de brindar garantías adicionales a los países con los que comercia.
La sesión de apertura de la Asamblea Mundial de Delegados contará con la presencia de altas personalidades mundiales, previéndose intervenciones de jefes de Estado y ministros de varios países. Será la primer asamblea con Monic Eloit como directora general de la OIE que asumió su cargo el pasado 1° de enero y se convirtió en la séptima directora general de la organización, pasando a sustituir al ex director general, el doctor Bernard Vallat.
OPORTUNIDAD. Uruguay es miembro de la OIE desde hace más de 20 años y siempre usó al organismo como referencia al momento de comerciar con el resto de los países. "Siempre hay que estar presente en la Asamblea Anual de delegados por la importancia que tiene para la sanidad animal mundial y los contactos que se generan con los directores de los servicios sanitarios de los países miembros", afirmó el doctor Francisco Muzio a El País, profesional que este año no integró la delegación.
En ese sentido, Uruguay está representado por el asesor técnico de la Dirección General de Servicios Ganaderos, José Gallero, la doctora Patricia Lagarmilla, el delegado permanente de Uruguay en la OIE, doctor Carlos Correa y en representación de los privados fue el doctor Jorge Bonino Morlán.
A lo largo de la semana se desarrollará la reunión del Grupo de las Américas de OIE, donde se discutirán aspectos que son claves para el comercio de productos de origen animal de toda la región.
STATUS. En lo estrictamente vinculado con la sanidad país, Uruguay va a refrendar su status de país libre de fiebre aftosa con vacunación y su calificación de país de riesgo insignificante para encefalopatía espongiforme bovina o enfermedad de la "vaca loca". Ambas son enfermedades de gran peso para el comercio de animales en pie, carne y varios de sus subproductos.
En materia de contactos será fundamental el que pueda mantener la delegación con las autoridades sanitarias de Estados Unidos, pues se espera de un momento a otro, la publicación en el Registro Federal de la normativa habilitando el ingreso de carne ovina con hueso, para animales procedentes del compartimento ovino.
Esta herramienta, avalada por el código zoosanitario de la OIE, junto con la trazabilidad individual de lo ovinos -se aplica sólo para el compartimento- será una garantía adicional para los mercados que quieran comprar el producto.
