Especialistas de Uruguay ya trabajan en un protocolo que es levemente más caro, pero casi igual de eficaz.

Yonnatan Santos Preste.
Desde hace varios meses Uruguay viene trabajando en distintas alternativas para sustituir el uso del Estradiol, tras la prohibición por parte de la Unión Europea y la decisión de Uruguay de segregar a los animales mediante la trazabilidad.
Al ser consultado al respecto, el doctor Guillermo de Nava, dijo que “estamos estudiando las respuestas a esa pregunta”.
“De hecho, frente al escenario del año pasado, que se anunció la restricción en el uso de estrógenos en programas reproductivos en Uruguay, procedimos a una serie de ensayos a efectos de determinar programas alternativos y básicamente aún los resultados no son concluyentes” dijo.
Pese a esto, informó que “podemos decir que tenemos distintos protocolos, siempre utilizando alternativas que pasan por el lado de una hormona que se llama GnRH, sigla en inglés para “Hormona Liberadora de Gonadotrofina” y con esa alternativa podemos acercarnos mucho a los resultados que obtenemos con los estrógenos”.
Sobre este punto se mostró optimista y señaló que “nosotros estamos a favor de poder seguir usando este producto en Uruguay, con las restricciones que se dan en los mercados, porque sin dudas que nos permite enfrentar los escenarios donde los impactos no sean tan grandes en los predios o ir manejando ya esta nueva alternativa, por temor a que el mercado nos castigue.
Desde el punto de vista económico, sostuvo que los costos que se manejan para el protocolo de IATF actual, cuesta en el entorno de los US$ 0,15 y se pasaría a US$ 0,70, “lo que no es significativo, por lo que entendemos que no va a estar ahí la limitante para seguir utilizando la tecnología en los establecimientos”.
Por su parte, Antonio Aguerre de la firma Genexys, dijo que “no es sustitutiva del Estradiol, porque el protocolo que más usan incluye tanto el cipionato de Estradiol como GnRH, y con ese combo se están teniendo excelentes resultados de preñez”.
“Se espera que con este producto caiga levemente el porcentaje, pero no en grandes proporciones, porque se logaría entre un 5 y 10% menos que el protocolo tradicional” y ejemplificó que “si un rodeo tiene un porcentaje de preñez del 78%, pasa al 68% y sigue siendo muy bueno”. Incluso un predio que tenía ambos productos, sumado al repaso de toros, llegó a un 98% de preñez, claramente utilizando todas las herramientas disponibles, más el manejo nutricional, sanidad y semen de calidad.
“El GnRH en estos casos empuja, realmente empuja” dijo.