José Ignacio Aramburu Toledo, realizó un balance del año, asegurando que lo mejor fue al final “donde se dio la tríada de lluvias, pasto y precios”. Consideró a los corrales “una gran herramienta que dan previsibilidad al negocio”. Dijo que la exportación en pie “le puso piso al ternero”. Y defendió el trabajo de los consignatarios “que aseguran el pago de haciendas en momentos complicados”. Aramburu dijo que “fue un muy buen año de Plaza Rural, que creció 15% en volumen”.

-¿Cómo analizas el año 2023, en general, para todo el sector agropecuario?

-En general, para todo el sector, fue un año de muchos altibajos, muy difícil, donde no es fácil llegar con los números, la mayoría de las empresas agropecuarias están dando en rojo. Un año donde habrá muchas pérdidas y, si Dios quiere, el 24 será para recuperarlas. Fue un año difícil para los ganados comprados, por ejemplo, con fideicomisos financiados, que cuando los venden ahora, en general no llegan a los valores de compra más los intereses. Lo único bueno de todo este 2023 es el fin del año, que estamos terminando, por suerte, con lluvias, pasto y precios, las tres cosas que se necesitan. O sea, un fin de año muy bueno.

-¿Qué te pareció el comportamiento del mercado ganadero en general?

-Las bajas sucesivas de los ganados nadie las esperaba, tanto en la invernada, como en el gordo especialmente, no se esperó que el gordo fuera a bajar tanto. Nadie lo pronosticó, por eso los números en rojo de este año. Está cada vez más volátil el negocio nuestro, en cuanto a los precios, siempre fue volátil, pero ahora está más que otras veces, con puntas, tanto para arriba como para abajo.

-Háblame del ganado gordo. ¿Piensas que estas últimas semanas de subas de valores se consoliden?

-Estos valores actuales ya sirven, comparado con lo que había. Creo que, si Dios quiere, va a seguir subiendo de a poquito, confío que esta suba de valores se consolide. Esperemos que no vuelva a bajar. No habría por qué, con el tema del clima como venimos, a las industrias supuestamente el número les está dando, por lo que algún margen habría para que estos valores se sigan consolidando. No veo el por qué tendría que bajar.

-¿Qué expectativas de valor medio de novillos y vacas tienes para el primer trimestre del 2024?

-No sé hasta cuánto va a subir, no somos quienes para decir eso, pero sí que se va a mantener en este eje y subir algo más, eso me parece que sí. Soy muy optimista que el arranque del año, en enero, valga varios centavos más que ahora. Capaz que le erro, pero soy muy optimista de que se concrete esa suba.

-Tomando en cuenta el precio promedio de exportación de carnes, ¿La industria tiene margen para pagar más?

-No estoy dentro de un frigorífico para hacer esos números, pero cuando uno ve el precio de la totalidad exportada, cuánto bajó, y ves a grosso modo, cuánto bajó el porcentaje del precio que pagaban a lo que están pagando ahora, por ahí sí, uno dice que sí. Pero esos números nosotros por lo menos no los manejamos, de afuera parecería que sí, pero insisto que ese no es un número que nosotros podamos decirlo.

-¿Qué opinas del momento de los corrales de engorde?

-Considero que sirven, es otra salida más que tiene el invernador, también es otra herramienta más que tiene la industria, obviamente, cuando tiene sus propios corrales, pero me parece que sirve mucho el negocio, es otro eslabón que se armó. Antes tenías un ternero bueno, lo llevabas a 300 y pico de kilos, 400 kilos, y no tenías a quién mandarle, porque al campo no lo podías llevar, que era un ternero gordo; y hoy los corrales arriba de 350 kilos te compran todo eso y te lo pagan muy bien. O sea, premian el ganado bueno, el ganado que llega con muchos kilos y en poco tiempo, joven. Los corrales son un eslabón que premian hasta la genética, si se quiere. En el tema del aumento de los precios, el número, como se sabe, siempre es muy justo de los corrales, pero lo bueno que tiene, es que, para encerrarlos, a no ser el corral de la industria, ya tienen un precio de venta. O sea, saben hasta cuánto pueden pagar para comprar. Por ahí no le erran, porque ya saben a cuánto van a vender, antes de comprar. Eso es lo ideal en cualquier negocio, si nosotros en el campo, un invernador, un criador, supiera a cuánto van a vender los terneros, podría hacer otro número más, de cuánto puede invertirle a la vaca y en toros, en lo que quiera, eso sería divino, saber en cuánto van a vender los terneros antes de entrar a la vaca. Esto el corral lo tiene, y por más que el número es fino, ya saben cuánto pueden gastar, porque ya saben a cuánto van a vender.

-¿Cuál es su posición sobre la exportación de ganado en pie?

-Nosotros usamos mucho la exportación de ganado en pie. Vendemos, por intermedio nuestro, mucho ternero entero. Me parece que es una solución fantástica, que le ha puesto un piso al precio del ternero. Obviamente, si lo ves en el volumen total de venta de terneros en el año, es muy poco el porcentaje, pero creo que ayuda a ponerle un piso a la categoría. Somos muy hinchas de la exportación en pie. Hay momentos, como pasó este año exclusivamente, donde valía 20 centavos más un ternero entero que un ternero castrado. Por lo general, la gente lo castra porque el invernador lo quiere así y destetado y le paga más. Pero si lo tenías entero y lo tenías al pie de la madre, valía más. Entonces, hay momentos en que la exportación sirve.

-¿Qué piensas sobre la concreción, o no, del negocio de las plantas de Marfrig a Minerva en Uruguay? ¿Cómo puede afectar al mercado?

-Creo que la concentración de plantas frigoríficas le puede hacer mucho daño y mucho mal al país, al negocio en sí, no sólo a los consignatarios, porque tienen una política directa de la anti-intermediación, están apuntando fuertemente a eso. Pero más allá de lo que pueda afectar a los consignatarios, creo que le puede hacer mucho mal al negocio en sí, por el libre mercado. También, como lo dijo un colega socio de Plaza Rural, está el tema de los pagos, siempre que un frigorífico ha dejado de cumplir compromisos, como pasó últimamente con los chinos, está el intermediario que responde. Por eso cobra una comisión, más allá de conseguir un buen precio por los ganados, de pelear el precio de cada uno de los clientes, porque puede llamar a varios frigoríficos y está en el negocio. Más allá de eso, hay un aval atrás, que es la otra parte importante de la consignación. Eso también influiría, insisto, me parece que le podría hacer mucho mal si se concreta este negocio.

-¿Cómo viste al mercado de reposición en el año, pese a los problemas de clima, etc.?

-El ganado se desplomó con la seca que tuvimos, una de las secas más grandes de la historia creo que ha sido, y el ganado bajó muchísimo. Por otro lado, por suerte había alguien que compraba, que era muy difícil, había que inventar los negocios para que se pudieran vender. Esta baja le afectó bastante a los productores y el desplome del precio fue muy abrupto, de semana a semana. Bajaba mucho el gordo y atrás venía la reposición, y a su vez con el tema de la seca arriba, fue un año muy difícil. Muy difícil.

-¿Qué balance haces del año 2023 para Plaza Rural?

-Fue un muy buen año. Plaza Rural creció un 15% sus cabezas vendidas, subimos más de 35.000 cabezas comparado con el año pasado. Pasó a ser remates cada 15 días, una cosa que vino muy bien. Con el tema de la seca, hubo un momento de la oferta era muy voluminosa y Plaza se adaptó a eso e hizo remates más seguido, cosa que el vendedor no tuviera que esperar 30, ni 45 días para la próxima venta. Acompañó al productor. Eso hizo que se vendiera más ganado. La directiva saliente, presidida por Carlos De Freitas, hizo varias cosas positivas, lo último que hicieron fue el tema de la herramienta de poder operar por la aplicación, donde se puede seguir online y operar desde la misma, no es necesario ni llamar ni levantar un teléfono. Hubo acuerdo con el laboratorio Biokhemia, para colaborar con la campaña oficial de combate contra la garrapata, para que todos los ganados que estaban en zona de garrapata, en un momento muy complicado al respecto, en el mismo momento que se filmaba, se hacía la inspección, se vacunaba. Se hicieron muchas cosas en Plaza Rural, por lo cual el balance fue muy bueno y sobre todo por el gran aumento de cabezas que hubo en ventas.

-La nueva directiva ¿tiene ideas de nuevas herramientas o servicios?

-Sí, por supuesto, ya se están manejando, entre ellas algunas son herramientas nuevas, que vamos a ver si podemos cumplirlas, y por otro lado se está hablando también de remates nuevos, varias innovaciones que obviamente no se pueden comentar hasta que no estén plasmadas y que esté todo concreto. Y aparte de eso, también vienen cosas de la directiva anterior pendientes, ideas pendientes que quedaron en manos nuestras ahora para terminar de concretarlas. Una de las cosas que tiene Plaza Rural es que siempre está tratando de innovar, de buscar, de inventar, esa es la idea, siempre siendo proactivo con esas cosas, porque todas las cosas que están, que sirven y que se usan, ya van quedando y siempre hay que buscar algo nuevo, estamos en eso. Para arrancar el año 2024, ya empezamos con un remate nuevo, el 2 de febrero, una venta especial de Angus en el marco de Agro en Punta, en el Centro de Convenciones en Punta del Este. O sea, siempre hay ideas en Plaza Rural para mejorar el servicio.

-¿Qué te significa ser el presidente de Plaza Rural?

-Primero, es una responsabilidad muy grande. Segundo, me enorgullece y me alegra la confianza que me tuvieron los socios al votar para que yo esté en este lugar. Y después, por otro lado, tiempo que vamos a dedicarle, además de mucho trabajo. Porque si alguien es presidente de algo, debe dedicarle tiempo, que es de las cosas que menos tenemos todos, y trabajo. Pero bueno, le dedicaremos todo eso para lograr hacer un buen desempeño y que Plaza Rural siga siendo líder en ventas virtuales como lo ha sido durante más de 20 años en el mercado.

-¿Cómo lo tomaría “Nacho” este momento?

-El que estaría más orgulloso hoy, contento y con el pecho inflado, sería sin dudas el viejo, sería papá. Él siempre me decía que yo tenía que llegar a ser presidente, pero obviamente soy muy de perfil bajo, como ya lo saben todos. No soy de hablar mucho, entonces por ese motivo me costaba. No por el trabajo, porque trabajar me encanta, estar dentro de la directiva me gusta, por eso estuve estos 10 años anteriores en directiva, me gusta; sí por el perfil bajo. Pero nos tocó trabajar y yo creo que él estaría más que orgulloso, y si Dios quiere, estará mirando desde allá arriba todo lo que hacemos.

-¿Cómo son los cargos de la nueva directiva?

-La nueva directiva que se armó, por un lado, me da tranquilidad y es una suerte los cinco integrantes que van a acompañarme, que son de primera. Una directiva con experiencia y con juventud. Estará Ignacio Victorica como vicepresidente, Alejandro Zambrano como secretario, Martín Slinger como tesorero, Álvaro García y Gerónimo Brea como vocales. Una directiva con ganas de trabajar, esperemos lograr buenas cosas para Plaza Rural.