Por iniciativa del Ministerio de Ganadería y el ministro Fernando Mattos, se entregó el plan SENDA a Alvaro Ramos, Martín Aguirrezabala y Tabaré Aguerre, ex ministros de la Cartera, y a Manuel Otero, director general del IICA, para que brindaran su visión al respecto en una actividad abierta que se realizó en la Expo Prado.

El Plan Estratégico establece 6 dimensiones abarcativas para el sector agropecuario, y contó con la presentación de la economista Verónica Durán. En este sentido, el Ministerio destaca el lento crecimiento económico del país que agranda las brechas de bienestar con los países más desarrollados, y para atacar ese problema clave hay que poner foco en la productividad debido al desempeño económico nacional vinculado al agroindustrial.

La agricultura del mundo debe producir cada vez más alimentos y fibras para cubrir una demanda en ascenso, pero con una superficie agrícola limitada. Por ello, hay mayor presión sobre los recursos naturales con una gran variabilidad y el cambio climático existente.

En la inserción internacional, las principales políticas para fortalecer propuestas fueron mejorar las capacidades de negociación para protocolos sanitarios y fitosanitarios, los agregados agrícolas en destinos comerciales clave y un plan conjunto con el Ministerio de Relaciones Internacionales para la formación de funcionarios diplomáticos en temas específicos de agroindustria.

Para la logística se buscará invertir en construcción y adecuación de corredores, carreteras y caminos, determinar sistemas de financiamiento y ajuste de normativa, además de mejorar la infraestructura portuaria existente y analizar nuevos desarrollos y la mejora de la regulación de los mercados clave.

En la sostenibilidad de los agroecosistemas habría que generar y divulgar información y conocimiento científico sobre impactos ambientales, revisar y adecuar la normativa para potenciar sinergias entre producción y cuidado del ambiente con base en criterios técnicos y generar insumos para promover la producción diferenciada con valor agregado ambiental.

Para el desarrollo productivo y social es importante la formación de trabajadores y productores, gestión de riesgos con política integral, desarrollo de sectores estratégicos y promover el riego con destino agrario, entre otros aspectos.

En las tecnologías de la información para el agro se busca apoyar la digitalización de los procesos, adecuar la infraestructura básica, los sistemas interoperables entre organismos públicos y desarrollar bienes vinculados a sistemas de información y política de datos abiertos.

Finalmente, en las capacidades institucionales el rediseño organizacional y mejoras de la gestión del Ministerio, mejoras de la institucionalidad agropecuaria y la creación de mesas ejecutivas para resolver problemas específicos.

Al respecto de los puntos establecidos por el plan SENDA, los expositores opinaron. Álvaro Ramos, ex ministro de Ganadería diferenció especialmente aquellas tareas que pertenecen directamente a la cartera y aquellas a las que debe estar atento, y dijo que el consenso está en que es un organismo regulatorio que defiende el status sanitario, porque “eso nadie lo discute”. Entre otros ítems, destacó que “no hay que inventar a cada rato el agua tibia”, y puso como ejemplo al sector arrocero por la integración sectorial del gobierno, con empresarios, productores, industriales y el ala de ciencia y tecnología.

Tabaré Aguerre dijo por su parte que debemos pensar en qué lugar del mundo nos vamos a ubicar, y “a esta altura nadie discute que es en la certificación, la calidad y el valor agregado ambiental”.

Para la conciencia agropecuaria, Aguerre dijo que es mucho más que generar una imagen positiva, “pasa por promover una transformación que genere un modelo nacional que identifique a la mayoría”.

Martín Aguirrezabala valoró estas instancias, ya que “menos de 500 millones de personas en el mundo viven en democracia plena, y nosotros estamos en ese grupo”, por eso hay que convencer para hacer, y para eso hace falta tolerancia y coraje. “Ahí estamos en falta”, dijo.

Del plan SENDA se animó a elegir dos ejes principales: productividad y sostenibilidad, porque son “el filo del cuchillo, si hacemos todo al mismo tiempo no hacemos punta al desarrollo”, finalizó.

El director general del IICA, Manuel Otero, dijo que la seguridad alimentaria está a tope de la agenda mundial y la agricultura comienza a generar simpatías porque el temor a la hambruna es grande. “La iniciativa es importante, pero lo es más la “terminativa”, y veo un futuro para Uruguay vinculado a la agricultura sustentable”, cerró.

A modo de cierre, el ministro Mattos agradeció a los presentes, y con el Multiespacio a tope de presentes, expresó que la institucionalidad agropecuaria de Uruguay es una fortaleza "pero fue diseñada en otro tiempo, y hay que trabajar en una que apunte al futuro", con instancias adicionales para que el sector privado participe en el rumbo del sector.