Sólido, maduro y genuino. Podrían ser tres adjetivos que describan la actualidad del negocio agrícola en Uruguay. En diálogo con Valor Agregado en radio Carve, Juan Ángel De La Fuente, productor agrícola de Soriano y ex presidente de la Asociación Agro-Pecuaria de Dolores, dijo que el país atraviesa una campaña desafiante, con una “primavera que acompañó climáticamente a los cultivos, pero con un precio que, si bien tenemos la esperanza todos los días que suba, aparentemente se va a mantener así”, expresó, refiriéndose fundamentalmente al cultivo de soja.
Actualmente los cultivos están bien y la salud financiera de las empresas también, según afirmó. “Entiendo que no existen empresas agrícolas con un grado de riesgo”, indicó el directivo de la Asociación Agro-Pecuaria de Dolores, quien agregó que está en contacto con los bancos, ya sea el Banco República como la banca privada, quienes han tenido una participación importante en el desempeño del agro uruguayo en los últimos años.
De La Fuente dijo que Uruguay produce en un “ambiente competitivo para todos, pero que hemos logrado llevar a un equilibrio que no genera hostilidad. Es de las mejores herramientas para pasar los malos momentos”, indicó.
Pooles de siembra. Visto y considerando la situación actual de los fondos de inversión, De La Fuente afirmó que “son situaciones diferentes” con los pooles de siembra que llegaron a Uruguay poco tiempo después de la crisis de 2002.
“Como aspectos positivos mostró que los negocios agrícolas podían hacerse de otra forma”, manifestó el productor, destacando la aparición de la figura de contratista, diferenciado en casos de propietario y financiador de los cultivos o productor.
“Los productores uruguayos nos vimos desplazados de las áreas agrícolas por la renta que los pooles podían pagar, pero cuando se fueron porque no daban los números, se “sinceró” el mercado, algo que volví a escuchar ahora”, sostuvo De La Fuente, agregando que en ese momento esas chacras empezaron a ser absorbidas por productores que se recuperaban de la crisis.
Además, el productor y ex presidente de la AAD dijo que los pooles nunca fueron al ahorro de los pequeños inversores. “Eran financiados por empresas beneficiadas por alguna situación cambiaria de Argentina, o por fondos de inversión grandes que tenían auditorías internas y externas, con calificadoras de riesgo, todos sabían lo que pasaba”, cerró.
Sobre los casos de Larrarte, Rep. Ganadera y Conexión Ganadera, De La Fuente dijo que en un país chico nunca es bueno, porque “erosiona la confianza”. “Hay que separar la paja del trigo, un negocio genuino de uno financiero. No es que los financieros estén mal, pero hay que entender de qué hablamos”, remató.