La habilitación del protocolo que permite exportar sorgo uruguayo a China comienza a dar las señales que se esperaba que diera, tanto en precios como en concreción de negocios y demanda.
Desde un principio, se manifestó que, una vez que se aprobara el protocolo pero sobre todo cuando se abriera el canal comercial, las propias directrices del mercado permitirían que el cultivo tuviera un negocio más auspicioso que cuando se colocaba solamente en el mercado interno.
En la presente semana, Las Achiras y TGL están concretando su primer embarque de sorgo a China, con 500 toneladas cada uno de ellos y con precios que, aseguraron, son muy promisorios.
“Tuvimos el permiso muy encima de la siembra, por eso solamente pudimos exportar lo que nos quedaba de la cosecha pasada”, estableció Gustavo Ferrari, director de Las Achiras.
En este sentido, destacó que las exportaciones están habilitadas para consumo humano y animal. “Se cumple con todas las especificaciones que pidió China, y en el este del país se hace aún más fácil porque está controlado el sorgo Alepo”, agregó el productor y empresario de Varela, Lavalleja.
Uno de los principales beneficios que podía tener la concreción de este tipo de negocios, más allá del negocio en sí mismo, es la medida que marca acerca del precio para el mercado local. “Le pone un piso”, dijo Ferrari.
Leonardo Olivera, director general de los Servicios Agrícolas, dijo que “se ha podido exportar en contenedores luego de cumplir con los controles que se establecen, y luego que se segrega la mercadería que cumple con todo se le da el permiso fitosanitario para ingresar a China”, agregando que afortunadamente no han habido inconvenientes al momento con esto.
“Hay más negocios que se van a hacer en estos días bajo el mismo proceso”, estableció el director general de los Servicios Agrícolas, agregando que se ha notado cierto interés en plantar sorgo con este destino por empresas y productores, pero todavía es difícil saber el área al que se puede llegar.
En las últimas zafras, se notó que el sorgo es un cultivo más rústico, con mejor resistencia a la sequía y mejor desempeño en lugares donde el maíz no desarrolla todo su potencial. Con este marco, en la medida en la que el cultivo se expanda en chacras de todo el territorio y con un negocio atractivo, las empresas de venta de semilla pueden explorar otras variedades, especialmente que controlen de mejor forma los inconvenientes sanitarios que lo aquejaban.
“En Argentina, el sorgo con destino a China superó el precio que se paga para usarlo en raciones, en ocasiones vale más que el maíz”, dijo Ferrari, quien agregó que con esta coyuntura ganadera donde se están usando otros granos para los animales, el sorgo va a valer bien y tendrá un piso de precio
