
Desde la Central de Pruebas de Kiyú, en el tradicional remate que coincide con el último día de la exposición Rural del Prado y marca el inicio de la zafra de toros, Daniel y Alejandro Dutra bajaron el martillo 28 veces para vender la totalidad de reproductores ofertados, alcanzando un promedio de US$ 4667.
Este arranque marca valores que se ubican un 29% por encima de los promedios de la misma venta en 2024. El valor máximo fue de US$ 7440, al tiempo que el mínimo fue de US$ 3.000.
“La gente está entusiasmada por entorar, fue un remate muy ágil, sin precios destacados pero con valorización en el promedio”, dijo Daniel Dutra, principal de Escritorio Dutra. El martillero destacó que todos los toros estaban preofertados, lo que muestra una dinámica especial que, según su visión, se mantendrá a lo largo de la zafra.
Además, dijo que el buen momento del mercado de haciendas, tanto en gordo como en reposición, así como la influencia del precio del ternero, incide en que la gente esté con ganas de entorar. “Va a ser una zafra que va a ir de menos a más”, sostuvo.
El año que viene la Central de Pruebas de Kiyú cumple 50 años, y la flamante presidenta de la Sociedad de Criadores de Hereford, Lucía Perdomo, valoró en este contexto esta instancia, así como la preparación que encararán hacia el 2026.
“Quiero destacar que salen muchos datos de los animales de Kiyú, más allá de la propia eficiencia de conversión, lo cual aumenta la confiabilidad de datos de EPDs, acá comprás mucha certeza y es realmente destacable”, indicó, valorando la solidez de tantos años de trabajo en la Central de Pruebas.
Para el año que viene, según comentó Perdomo, ya hay 40 cabañas anotadas para participar del remate.