El 2025, para el mercado de compra venta de campos fue un año donde “pasó de todo”, desde cambios internos a nivel gubernamental, hasta temas del exterior como la guerra arancelaria, siendo aspectos que terminan impactando en este mercado, según detalló Federico Delgue, director de Los Cardinales.
En diálogo con Valor Agregado de radio Carve, el operador inmobiliario comentó que se ha dado “un cambio sustancial en los jugadores que llegaron al país con la intención de refugiar capital, y sorprende un poco el nivel de dinamismo que se terminó concretando en el segundo semestre del año con eventuales compradores uruguayos y brasileros”.
El 2024, que fue un año récord en cuando al volumen comercializado, estuvo marcado por la presencia de inversores europeos, americanos y asiáticos, “y hoy si bien están, el principal jugador está acá en la región”.
Sobre la presencia del inversor brasileño en Uruguay, Delgue sostuvo que se da “a través de una decisión empresarial o familiar, tomada en búsqueda de una diversificación en la cartera de inversiones, es algo que trasciende a los gobierno, por eso pienso que para el año que viene no va a cambiar de manera drástica a pesar de las elecciones en Brasil”.
El buen momento del escenario ganadero, por el momento “no ha impactado en el valor de los campos ganaderos. Pienso que eso se puede dar en el final del 2026 si esto continúa en esta línea, me imagino un 10% por encima. Hoy el negocio ganadero es tentativo más allá de los difícil que es poblar un campo hoy por los valores de la reposición, además el manejo sanitario es un desafío, entonces eso genera un equilibrio”.
Con este contexto planteado, un campo netamente ganadero en Artigas, Salto o Paysandú se ubica entre US$ 3.000 y US$ 3.200 por hectárea, mientras que más al este del país, en Cerro Largo, con un porcentaje del campo apto para agricultura se concretan negocios algo por encima de estas referencias, según indicó el director de Los Cardinales.
Por su parte, los campos agrícolas “están siendo muy demandados, aunque aún hay algunos campos que están desfasados en valores, más allá de que se están concretando algunos negocios a valores fuera de serie, principalmente en el litoral oeste, en campos que son de baja dimensión y mucha área efectiva para agricultura, a precios entre US$ 12.000 y US$ 13.000. Hace poco se vendió un campo con costa al Río de la Plata, con un índice coneat de 240 a US$ 25.000, pero es algo distinto ahí, el comprador buscó algo que habitualmente no hay”.
“Si te vas a Río Negro o sur de Paysandú los campos están entre US$ 9.500 y US$ 11.000”, agregó.
Por último, sobre los campos forestales afirmó que “siempre es el más demandado, el inversor outsider apunta a un campo forestal porque le genera cierta certeza cuando lo arrienda por 22 años, eso le da mucha tranquilidad al inversor que busca refugiar plata. Nosotros este año tuvimos el orgullo de participar en una licitación privada de un fondo de inversión importante, donde concretamos la venta de un campo que tenía pino y eucalipto a valores fuera de serie”.