El stock de carne vacuna importada en China en agosto cayó por tercer mes consecutivo. La firma OIG+X, en su informe mensual, dijo que bajaron al menor nivel desde junio de 2022 y que son alrededor de 15%-20% menores al volumen de mayo. “La actividad comercial fue intensa en agosto, principalmente debido al aprovisionamiento para el Festival del Medio Otoño, lo que resultó en una rotación más rápida de bienes en el mercado”, argumentó OIG+X.
El elevado nivel de los stocks de carne vacuna imsportada en China fue un argumento consistente de los importadores para reducir los precios de compra durante todo 2023 y la primera mitad de este año. Esto comenzó a revertirse a partir de junio y muestra una consistente baja en el último trimestre, lo que da sustento al mayor interés comprador desde China a partir de principios de julio, con una mejora de los precios que, en algunos casos, llegó a ser de 10-15%.
Sin embargo, en la última semana se advirtió una menor presión compradora desde los importadores chinos, con intentos de corregir los precios a la baja. “China se frenó de golpe desde mediados de la semana pasada”, expresó un trader argentino a Faxcarne.
Para que el repunte de la demanda china sea consistente se precisarán noticias más alentadoras sobre la evolución de su economía y demanda interna en el mediano plazo, de manera que los importadores tengan la confianza suficiente como para mantener una presión de compra sostenida en el mercado internacional. Por el momento, se duda que China logre el objetivo de crecimiento de 5% de su economía este año.
De todas maneras, se está cumpliendo con lo usual, que es una recuperación de la demanda en el segundo semestre del año, cuando los importadores comienzan a abastecerse ante la previsión de demanda adicional por las festividades del Año Nuevo sobre fines de enero.