"La efervescencia en torno al caballo Criollo es hasta difícil de explicar. La familia tomó esto con pasión y esa es la razón", expresó José María "Poro" Campiotti, productor agropecuario y presidente de la Sociedad de Criadores de Caballos Criollos del Uruguay, quien participó este domingo participó en Hablemos de Agro, de Canal 10, p quien analizó la coyuntura actual y comentó sus proyecciones para el futuro del sector.

Campiotti comenzó refiriéndose al reciente paro de la Federación de Obreros de la Industria Cárnica (Foica) y a los ajustes en los precios del ganado: “Esta es la pulseada que siempre se da en esta época. Si me pongo del lado de la industria, usaría todas las armas que tengo para defender mi posición y conseguir mejores precios”, afirmó. El productor no se queda atrás en esta disputa: “Si tiene fuerza, aguantará y pulseará para que no le bajen el precio que aspira. Este es un momento bisagra, donde la fuerza del productor es clave para defenderse”, subrayó Campiotti.

A pesar de la tensión, el referente reconoció que la oferta de ganado no es abundante. “No hay ganado gordo, eso lo sabemos todos. Y aunque haya algo en la primavera, no será en exceso”, adviertió, refiriéndose a los bajos niveles de oferta actuales.

Ante la pregunta de si se puede volver a ver un novillo superando los 4 dólares, como ocurrió recientemente, Campiotti fue cauto: “Es difícil de predecir. Si todo fuera en base al precio de exportación, sería más simple. Pero acá todo se rige por oferta y demanda”, sostuvo. Sin embargo, lanzó una observación clave sobre los precios de consignatarios: “Los precios que se ven en consignatarios no son los únicos que existen. Hay ventas importantes que no pasan por ellos y tienen otros precios”, deslizó, haciendo referencia a un mercado menos visible pero igual de influyente.

Otro aspecto crucial es la relación entre industria y productor, marcada por la integración en torno a sistemas como la Cuota 481 y el ganado de corral. “Yo creo en el encadenamiento, pero para eso debe haber confianza. Si no la hay, es muy difícil lograrlo”, comentó. A pesar de que él mismo forma parte de un sistema encadenado, reconoce que esta confianza no es generalizada: “Veo que la mayoría no tiene confianza, y eso complica las cosas”.

En cuanto al negocio de la cría, Campiotti fue optimista: “La cría es un gran negocio. Hoy, manejada con índices de preñez por encima del 90% y terneros de más de 180 kilos, es muy rentable”, afirmó. Además, expresó que la exportación en pie será canal clave para el futuro.

El tema del carbono neutro es una tendencia creciente en el sector ganadero, y Campiotti ve oportunidades claras: “Ya hay demanda por carne criada en carbono neutro. El que logre un balance positivo de carbono podrá venderlo”, aseguró. Aunque implementar prácticas de carbono neutro puede implicar cambios en los sistemas de producción, Campiotti cree que el primer paso es entenderlo: “Habrá que estudiar mejor algunos aspectos, como el impacto de la urea o las pasturas naturales, para mejorar los balances de carbono”, explica.

Finalmente, Campiotti reflexionó sobre el crecimiento de la raza Criolla en Uruguay, destacando el papel de la familia y el valor social del caballo: “El caballo criollo es mucho más que un animal. Hoy la familia compite junta, el padre y el hijo participan en pruebas, y eso genera un clima familiar increíble”, expresa.

Con cifras récord de inscripciones y pruebas, Campiotti ve un futuro promisorio para la raza: “Hay espacio para seguir creciendo. El caballo criollo está en un momento de expansión que pocos imaginarían”, concluyó.