Se calibran y prueban en tres frigoríficos y luego se extenderán.
Pablo Antúnez.
El presidente del Instituto Nacional de Carnes (INAC), Federico Stanham, dijo a El País que se cerró el contrato con el proveedor de los scanners electrónicos que tienen por cometido la tipificación objetiva de las carcasas durante la faena.
A partir de esta fase se instalarán en tres plantas frigoríficas y “hay una primera etapa que es calibración de los equipos, que vendría a ser algo así como enseñarles a tipificar en base a la información que manejamos los humanos, para decirle que la res tiene una determinada cobertura de grasa”.
Una vez aprendido eso, el equipo interpreta las fotografías que saca de las canales en base a un software. “Esa es la etapa en que estamos ahora. Se instalan tres equipos en igual número de plantas -se está haciendo en estos días- y luego viene el trabajo de calibrarlos, que se hará con varios miles de cabezas de ganado y esperamos que eso esté terminado entre un mes y medio y dos meses”, explicó Stanham.
El titular del INAC explicó que posteriormente, viene la etapa de instalación del sistema en el resto de las plantas y consideró que esta tarea “va a llevar 10 o 12 meses más en completar todo el proceso”.
En Uruguay hay dos plantas que ya tienen instalados estos equipos y su evaluación es muy positiva, porque esta tecnología le otorgó mayor confianza a los remitentes de ganado.
El uso de los scanners electrónicos de tipificación de las carcasas pretende darle mayores certezas al productor que remite sus ganados a faena a los frigoríficos uruguayos, como lo hicieron otros países. Un caso claro es la ganadería de Irlanda.
La instalación de los scanners electrónicos de tipificación de carcasas fue establecida por el Decreto 310/2016 y el documento establecía que deberían estar instalados en los frigoríficos exportadores en agosto de 2018, pero la fecha, seguramente no se va a cumplir, pues el proceso de estudio de ofertas y adjudicación se extendió un poco más de lo pensado.
Uruguay es un país que hace punta en cuanto a tecnología en la cadena cárnica y apuesta a crecer, vertiendo su producción a los mercados más selectos, basándose en la calidad y en sus certificaciones. Estos equipos podrán diferenciar más esa calidad, pues hoy la tipificación de carcasas las hace un operario.
El productor ganadero podrá tener mejores señales para puede producir con mayores certezas.
