Ayer se definieron y plantearon algunas líneas de trabajo.
Reunión de la cadena láctea. Foto Juan Dellapiazza.
Las gremiales lecheras, la industria láctea en su conjunto y los queseros artesanales conforman la cadena láctea. Ayer, estos actores coincidieron en evaluar como "positiva" la reunión mantenida con las futuras autoridades del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP): Carlos María Uriarte (ministro designado), Ignacio Buffa (subsecretario designado) y Fernanda Maldonado (directora general de Secretaría designada). Allí delinearon cuatro líneas de trabajo.
"Algunas líneas de trabajo están vinculadas con el anteproyecto de ley de urgente consideración, donde en los próximos días habrá que tener alguna respuesta, pero también están vinculadas con lo que será el Instituto Nacional de la Leche (Inale), con lo que se pretende del organismo y otros aspectos", dijo a El País Darío Jorcín, productor lechero. "En condiciones generales se habló de lo que el sector lechero pretende", dijo el dirigente gremial y productor de Colonia.
Jorcín contó que el encuentro de ayer se transformó en "una charla informativa de ambas partes. Hablamos de igual a igual con el futuro ministro y con el subsecretario. Se habló sin contratiempos".
Los productores dicen sentirse "escuchados" y "levantando puentes para seguir trabajando. La reunión nos deja contentos y con mucha alegría, porque estamos hablando con sinceridad, podemos transmitir lo que se pretende del sector y logramos que nos escuchen", señaló Jorcín.
La cadena láctea considera que con el gobierno entrante está logrando una cercanía que muchas veces no se encontró con otros gobernantes. Jorcín estimó que estas reuniones "se van a seguir dando, porque las nuevas autoridades están muy abiertas a escuchar".
En la mañana, Uriarte se reunió con el presidente de la Cooperativa Nacional de Productores de Leche (Conaprole), Álvaro Ambrois.
A la salida del encuentro, Ambrois dijo que "la deuda que mantiene Venezuela está documentada y existe. Venezuela como tal tiene esa deuda así que alguien en algún momento se deberá hacer cargo".
En julio de 2015 los gobiernos de Uruguay y Venezuela anunciaron un acuerdo que permitía la venta de 265.000 toneladas de alimentos nacionales al país caribeño por un total de US$ 300 millones.
El acuerdo -que contemplaba la venta de 120.000 toneladas de arroz, 44.000 toneladas de leche en polvo, 80.000 toneladas de soja, 9.000 toneladas de pollo y 12.000 toneladas de queso- fue calificado en aquel entonces por el presidente Tabaré Vázquez como "oxígeno puro" para Uruguay.
Bajo este paraguas varias empresas de alimentos uruguayos realizaron exportaciones a Venezuela, pero hasta el día de hoy Conaprole -la empresa láctea más grande del país y una de las que envió productos a la nación caribeña- espera cobrar parte de las ventas que hizo. La deuda asciende a US$ 30 millones.
Consultado acerca de si se evalúa que el gobierno uruguayo pague la deuda que Venezuela mantiene con Conaprole para luego tratar que el gobierno de Maduro abone ese monto, Uriarte dijo que "es uno de los temas que está sobre la mesa. Ya lo hemos hablado incluso con la próxima ministra de Economía" en referencia a Azucena Arbeleche.
Uriarte dijo que se manejan "varias opciones" mediante las cuales realizar este pago, pero agregó: "a nuestro entender es un reclamo lógico, justo, porque el gobierno saliente tuvo una responsabilidad muy evidente de por qué se hizo negocios con Venezuela. Es un tema que debemos analizar".